Secciones

Estudio pone en duda efectos buenos del consumo moderado de alcohol

E-mail Compartir

Un estudio publicado la semana pasada cuestiona la idea de que el consumo moderado de alcohol pueda ser benéfico para la salud.

El estudio, hecho en China, encontró que el consumo moderado de alcohol aumentaba ligeramente el riesgo de sufrir derrames cerebrales o hipertensión arterial. Aunque no lograron determinar si el alcohol también aumenta las probabilidades de un ataque cardíaco.

Desde hace tiempo se ha dicho que las personas que toman uno o dos tragos al día tienen un menor riesgo de sufrir derrames cerebrales o problemas cardíacos que los abstemios. Sin embargo, los científicos no estaban seguros de que el consumo moderado de alcohol los protegiera o si las personas que no lo consumían tenían otros problemas.

"Las afirmaciones de que el alcohol era algún remedio mágico, protector... no tenían ninguna base científica particularmente seria", dijo Richard Peto, de la Universidad de Oxford y uno de los autores del estudio.

Peto dijo que sus hallazgos deberían ser válidos para otras poblaciones fuera de China y para cualquier bebida alcohólica, como la cerveza o el vino, incluso si los participantes del estudio bebieron principalmente licor.

La investigación se publicó en la online de la revista Lancet.

Para el estudio, los científicos chinos y británicos consideraron la genética. Se enfocaron en dos variantes comunes entre los asiáticos orientales que pueden hacer que beber alcohol sea desagradable. Para aquellos con las variantes, al beber alcohol pueden rápidamente ponerse rojos, y tener taquicardia, náuseas o dolores de cabeza.

Los científicos monitorearon a 500.00 personas de diversas partes de China durante una década. Registraron sus historiales médicos, incluso si fumaban o hacían ejercicio, y cuánto alcohol bebían. Una tercera parte de los hombres reportó beber casi todas las semanas, comparados con pocas de las mujeres.

El estudio halló que el alcohol aumenta el riesgo de derrame cerebral en alrededor de un tercio por cada cuatro tragos adicionales al día. Los investigadores no hallaron efectos protectores en el consumo moderado. Para quienes beben hasta dos tragos al día -consumo moderado- los científicos dijeron que aumentaría su probabilidad de sufrir un derrame cerebral entre 10% y 15% comparado con los abstemios. No hubo suficientes ataques cardíacos entre los participantes para sacar una conclusión sobre este riesgo.

La carne vegetal gana terreno y multiplica su oferta

Una mejor tecnología y sus ventajas en términos ambientales han empujado el interés de los consumidores en el Hemisferio Norte, a tal punto que cadenas de comida rápida ensayan productos basados en carne vegetal.
E-mail Compartir

Redacción - Medios Regionales

Desde minihamburguesas de soya hasta salchichas de lentejas, los sustitutos de la carne a base de plantas están ganando popularidad. Y los carnívoros -no los vegetarianos ni los veganos- son sus principales consumidores.

La creciente demanda de alimentos más saludables y sustentables es una de las razones por las que la gente consume más carne a base de plantas. También es una de las razones detrás del aumento en la venta de leche de avena, masa de pizza de coliflor y de cosméticos a base de aceite de coco.

"Hay abundantes pruebas de que las plantas son muy fuertes. Te dan energía, sientes que son algo bueno para ti", afirma Melanie Bartelme, una analista de alimentos de la firma consultora Mintel.

Una mejor tecnología y comercialización impulsan las ventas. Startups como Impossible Foods o Beyond Meat -ambas apoyadas por el fundador de Microsoft Bill Gates- han seducido a muchos carnívoros con productos a base de plantas que se ven y saben a carne.

"A los amantes de la carne no les gusta la idea de que su carne provenga de animales muertos. Les gusta por el placer sensorial que les produce y además están acostumbrados a ella", sostuvo el CEO de Impossible Foods Pat Brown. "Si podemos ofrecerles lo que a ellos les gusta, solo que hecho a partir de plantas, lo comprarán y lo preferirán" a la carne animal.

El producto Beyong Meat es vendido junto a la carne natural en los almacenes, donde no los esconden en congeladoras ni los ubican en estanterías de hamburguesas de vegetales. Impossible Foods, que tiene su sede en el Silicon Valley, sacó al mercado sus hamburguesas hace tres años surtiendo a restaurantes finos como Momofuku Nishi de Nueva York. Ahora surte a más de 5.000 restaurantes de EE.UU. y Asia.

La cadena de comida rápida Burger King está ensayando una hamburguesa con carne alternativa, el Impossible Whopper, en 59 locales de San Luis.

Burger King ya tiene una hamburguesa vegetariana en su menú, pero el presidente de su división de América del Norte Chris Finazzo dice que solo atrae a veganos y vegetarianos.

"Hay mucha gente que quiere comer hamburguesas todos los días, aunque no necesariamente carne", expresó.

En Estados Unidos, solo el 7% de la población es vegana o vegetariana, según Finazzo. Pero cada vez más gente se maneja en ambos mundos y consume lo que le parece más atractivo.

El Impossible Whopper es más saludable en algunos terrenos y menos en otros. Tiene 630 calorías, comparado con las 660 del Whopper de carne. Y menos grasa saturada, grasas trans y colesterol. Pero más sodio y carbohidratos. Las dos hamburguesas tienen cantidades similares de proteínas.

La hamburguesa vegetariana MorningStar de Burger King tiene 390 calorías, menos grasa y colesterol y cantidades similares de sodio y carbohidratos que un Whopper normal.

Las hamburguesas de carne alternativa tienen otras ventajas. Beyond Meat dice que consumen un 99% menos de agua, un 93% menos de tierras y un 50% menos de electricidad. Emiten además un 90% menos de gases de efecto invernadero.

Las ventas de carne a base de plantas aumentaron un 42% entre marzo del 2016 y marzo del 2019, según Nielsen. Las de carne pura subieron solo un 1%.

Y Bartelme cree que esa tendencia se mantendrá.

Hay quienes piensan que al consumidor no la gustará la idea de que las carnes a base de plantas son altamente procesadas. Pero Brown destaca que, hoy por hoy, casi todos los alimentos son procesados de alguna forma. "Casi nada de lo que se consume hoy cayó de un árbol", dice Brown. "Lo que comemos es producto de la naturaleza combinada con la ciencia, la investigación y el ingenio" humano.