Nuevo ácaro exterminaría plagas en cultivos desérticos
Investigadores de la Universidad Arturo Prat descubrieron un arácnido depredador endémico.
El primer ácaro depredador endémico denominado "Neoseilus tarapacensis" en honor a la región de Tarapacá, fue descubierto por el doctor Víctor Tello, académico de la Facultad de Recursos Naturales Renovables de la Universidad Arturo Prat (Unap).
La importancia de este descubrimiento radica en que podría actuar como un promisorio controlador biológico en los cultivos agrícolas para las zonas desérticas, según describió Tello.
Zonas áridas
"Hay que partir del hecho que no existen controladores biológicos eficientes en zona áridas a nivel mundial, por lo que esto podría revolucionar el área, beneficiando a cientos de cultivos que hoy están desprotegidos y cuya única solución es la aplicación de pesticidas sintéticos, los cuales afectan significativamente la salud de los consumidores, productores agrícolas y el medio ambiente", expresó el investigador.
A juicio del científico, el descubrimiento del "Neoseilus tarapacensis" abre nuevos caminos para enfrentar las distintas plagas que hoy afectan cultivos fundamentales para la región.
"Hablamos de los cultivos de cítricos, alfalfa, melón, claveles, entre otros. Sabemos que este ácaro es una excelente oportunidad para que, con un uso adecuado, podamos aumentar la productividad que se veía afectada por las plagas. Ahora lo importante es abocarnos a estudiar sobre qué plagas de ácaros fitófagos y cultivos es más efectivo", sostuvo.
Este descubrimiento es el resultado del trabajo y acompañamiento de Tello a dos tesis, una realizada por Osmán Peralta, titulado de la carrera de Agronomía y que trabajó identificando especies de ácaros en la región, y de Vania Ugrinovic, también titulada de esta carrera, que se encargó de establecer si el ácaro en cuestión podía vivir y reproducirse a baja humedad relativa.
De acuerdo al especialista, los últimos inventarios en Chile precisan que existe un número aproximado de 617 especies de insectos y 49 de ácaros asociados con plantas cultivadas.
"De estos pueden ser consideradas como plagas de importancia económica en el caso de Tarapacá, Arica y Parinacota aproximadamente 182 especies, lo que involucra un serio peligro para los cultivos presentes que, además, de enfrentar condiciones difíciles como el suelo, la falta de agua y una alta oscilación térmica, deben sumar la voracidad de los ácaros", precisó.
Plagas agrícolas
Agregó que el manejo de plagas agrícolas, especialmente de insectos y ácaros fitófagos, es un problema de primer orden que debe resolverse para obtener rendimientos aceptables desde el punto de vista económico.
"Tradicionalmente, el manejo de plagas se ha realizado a través de la aplicación de insecticidas sintéticos de amplio espectro, que sí bien han logrado menguar las poblaciones de las plagas, también han causado graves problemas como la contaminación de napas subterráneas y de suelos; impacto negativo sobre la fauna", contó.
Tello afirmó que esta aplicación trae como resultado estos efectos nocivos sobre la salud de aplicadores y contaminación de alimentos, entre otros.
Investigación
Este hallazgo ya fue reseñado en enero de 2019 en la revista de corriente principal "International Journal of Acarology" y es por ello que como parte de la evolución de la investigación se proponen reunir recursos.
"Para ello deseamos postular a distintas fuentes de financiamiento y continuar así los estudios de este ácaro de la familia Phytoseiidae que podría acabar con las plagas no solamente del norte de Chile, sino en otros lugares del mundo donde el clima desértico esté presente.
"Es una excelente oportunidad para que, con un uso adecuado, podamos aumentar la productividad".
Víctor Tello académico de la Facultad de Recursos Naturales Renovables de la Unap."