Futuro de Iquique

Un nuevo proceso de consolidación participativa es el que daremos como Municipalidad de Iquique, al disponer de una consulta abierta a la comunidad y que permita definir las alternativas de desarrollo que tenemos para nuestro territorio y así avanzar en la actualización del anhelado Plan Regulador Comunal (PRC).

Hoy tras avanzar en la etapa de Diagnóstico, nos perfilamos en socializar la Imagen Objetivo ante la comunidad, exponiendo los distintos modelos de ciudad que queremos para nuestro futuro, fortaleciendo dentro de otras áreas; la movilidad dentro de los distintos sectores, como también generar modelos que busquen fortalecer el espacio público y la vida de barrios, que tan tradicionales eran en el Iquique de antaño.

Iquique, al iniciar su proceso de desarrollo y expansión a mediados del siglo pasado, constituye su crecimiento en torno a un modelo de barrios o unidades, principalmente bajo el sistema de cooperativas.

Esta forma de urbanización perduró hasta la década del 90, cuando cambia radicalmente el sistema de densificación, surgiendo la construcción de edificios y la aparición de condominios, asociados principalmente al boom minero de esa época.

Pese a esto, el modelo de barrios ha sido una tónica en el desarrollo del Iquique contemporáneo, el que se busca complementar en el futuro con un sistema de "policentros", es decir generar alternativas al centro urbano local, estableciendo plataformas de servicios tanto públicas como privadas al interior de la ciudad, fortaleciendo dentro de otras cosas; la vida de barrios, el surgimiento de más espacios públicos, no teniendo además que trasladarse para recibir distintas atenciones.

Nuestra propuesta a la comunidad es innovadora, luego que junto al Concejo Municipal hemos consolidado una actualización del Plan Regulador Comunal con un enfoque participativo, de modo que en esta tercera etapa (de cinco en total) acojamos en el mismo nivel durante octubre, la visión de vecinos, gremios y representantes sociales y así todos construyamos el Iquique del futuro.

"El modelo de barrios ha sido una tónica en el desarrollo del Iquique contemporáneo".

Mauricio Soria Macchiavello, alcalde de Iquique."

Sebastián Dávalos se adjudicó la frase dicha por su mamá, "Me enteré por la prensa" como marca, en una larga disputa con Canal 13. Pero esto recién comienza, porque de seguro también debería aspirar a lograr los dominios de otras frases como: "Formaré una comisión", "En mi gobierno nadie se repetirá el plato", "Cada día puede ser peor", "No hay alarma de tsunami", "Paso", "Todes" y otras.

Tal vez sea una muy efectiva manera para resguardar y de ir materializando el legado familiar.

Cuando el orden de los factores altera el producto

Más allá del debate respecto de la conveniencia o no de rebajar la jornada laboral a 41 o 40 horas y cuánto incidiría en la productividad, conviene abrir la discusión para dejar de centrarnos en el trabajador como el único responsable de este indicador que, además, es tan esquivo para Chile.

La productividad es una consecuencia de varios factores y no solo de las personas, como se ha señalado en algunas oportunidades. Es lo que se conoce en economía, como la Productividad Total de Factores que incluye las mejoras o innovaciones tecnológicas, la eficiencia y, por cierto, la calidad de la mano de obra. Diferente es hablar de productividad solo como la mera relación entre insumo y producto final.

No es novedad que todos los índices de productividad del país, según los estándares de la OCDE, sean deficientes. En el ranking de esta organización de la que somos miembros, Chile, es el quinto país menos productivo y con la jornada laboral más extensa. En el otro lado, Alemania tiene la productividad más alta con la jornada laboral más corta.

Además, el porcentaje del PIB que destina Chile para la inversión en I+D es seis veces menor que el promedio de la OCDE (2,34%), es decir, la más baja del club.

La pregunta de fondo, tal vez, no debería circular en torno a trabajar menos, sino a trabajar mejor, es decir, en condiciones adecuadas y desde una mirada multidimensional, en la cual la reducción de la jornada laboral sea la consecuencia de un debate de fondo y con visión de futuro.

Así las cosas, vale la pena preguntarse qué pasa con la correlación de factores que esta vez, si parece alterar el producto.

Catalina Maluk Abusleme

Directora Escuela de Economía

y Negocios U.Central

Luis Enrique Soler Milla