Evelin Aguilar Paniagua
De los 23 jardines infantiles particulares pagados que actualmente funcionan en Tarapacá, nueve todavía no cuentan con la autorización de funcionamiento que, desde el 2018, comenzó a exigir el Ministerio de Educación (Mineduc).
El plazo inicial para tenerla vencía en agosto de este año, sin embargo, con la Ley Miscelánea se extendió en 40 meses, quedando como fecha final el 31 de diciembre del año 2022.
Así lo dio a conocer el seremi de Educación, Natan Olivos, quien precisó que, en consecuencia, son 14 los establecimientos privados que cuentan con dicha certificación en la región. Eso sí, no entregó los nombres de estos como tampoco de aquellos que aún no han obtenido la autorización.
Según establece el Decreto 128 del Mineduc, documento que reglamenta los requisitos y establece el procedimiento de obtención, aquellos establecimientos de educación parvularia que -tras vencerse el plazo- no cuenten con autorización de funcionamiento, "no podrán funcionar ni publicitarse como tales o con denominaciones análogas como salas cunas o jardines infantiles".
Además, la norma establece que, en caso de incumplimiento, la Superintendencia de Educación dispondrá inmediatamente la clausura.
La autoridad regional de Educación precisó que a la fecha no figuran jardines infantiles privados en proceso de evaluación.
"Como Seremi de Educación, queremos hacer un llamado a los restantes jardines infantiles a iniciar el proceso ya que son muchos los aspectos que se evalúan a la hora de entregar la autorización", expresó.
Exigencias
Estos múltiples aspectos que la institución exige para otorgar la certificación guardan relación con los ámbitos pedagógico, jurídico y de infraestructura.
Por ejemplo, establece que no podrán construirse ni habilitarse locales, ni muros medianeros con adobe o albañilería simple; y que el área docente y las áreas de uso y de tránsito destinadas a párvulos no podrán tener revestimiento de papel mural y los pisos no podrán estar cubiertos con alfombras, como tampoco se permitirán puertas de vaivén, corredera, ni plegables.
"Es importante señalar que la Seremi de Educación tiene 90 días hábiles para aprobar o rechazar la solicitud de autorización de funcionamiento, por lo que el sostenedor debiese iniciar el trámite como mínimo tres meses antes de la fecha final", advirtió la autoridad.
De acuerdo a la Ley 20832, los jardines infantiles con autorización de funcionamiento deben informar, trimestralmente, la matrícula y la asistencia de los niños que atiendan, el Mineduc. Asimismo, estarán sujetos a la fiscalización de la Superintendencia de Educación.
Garantía para los apoderados
Uno de los establecimientos de educación parvularia que cuenta con esta autorización es " Pachakuti". Su directora Sandra Segel, explicó que debido a que la sala cuna y jardín comenzó a operar en 2018, acondicionaron toda la infraestructura a las exigencias de la ley, las cuales "son mayores para los niveles más grandes". Recalcó que debido a que los jardines que tienen esta certificación son fiscalizables, los apoderados deberían consultar si el recinto donde matriculan a sus hijos cuenta con esta, ya que ello les garantiza que cumple con las normativas de los ministerios de Educación y Salud.