Experto expuso la relación entre buen dormir y la salud
Doctor Reyes Haro, de México, participó en el segundo congreso de Liderazgo Científico: "Uni2 x la Ciencia".
Los trastornos del sueño son aquellos que están relacionados con el dormir: apnea, sonambulismo, y en el caso de los niños los terrores nocturnos. Además, el más común: el insomnio.
Durante el segundo congreso de Liderazgo Científico: "Uni2 x la Ciencia" que realiza la Universidad Santo Tomás, el doctor Reyes Haro, de la Universidad Autónoma de México, presentó la charla "Dime cuánto duermes y te diré cuántos años vivirás", en la cual precisó el nivel de daño a la salud que provoca no dormir al menos siete horas en el caso de los adultos.
El doctor, especialista en trastorno del sueño, explicó que en los niños y jóvenes, la exposición a artefactos eléctricos en horas de la noche los mantiene lentos durante el día, dificulta su crecimiento y, a largo plazo, deteriora la salud.
"Es poca la importancia que se le da al dormir. Se desconoce realmente todas las funciones que se dan durante el sueño, pero hoy podemos saber qué pasa con el cuerpo a partir de las cuatro etapas que se dan al dormir", explicó.
Al dormir, se producen hormonas, nuevas células, neurotransmisores, regeneración del cuerpo, se fortalece el sistema inmunológico y las funciones mentales superiores, apuntó Haro.
"Dormir va mucho más allá que descansar. Una de cada tres personas padece de trastorno de sueño. El insomnio o hipersomnia (dormir en exceso) y otras alteraciones como la muerte súbita en recién nacidos son problemas del sueño", manifestó.
Explicó que los bebés requieren hasta 20 horas de sueño al día, mientras que los adolescentes necesitan entre siete y nueve horas diarias, y los adultos mínimo siete horas.
Para el especialista en la medida que estas horas sean menos, aparecerán problemas de salud en las personas y empeoran sus expectativas de vida.
Consecuencia
Al dormir menos hay una etapa de sueño profundo que tenemos todos cada noche, en donde el cuerpo se regenera y se produce la hormona del crecimiento; significa que crecemos dormidos y los adolescentes que pasan mucho tiempo privados de sueño, afectan esa función tan importante del desarrollo. También tendrán disminuida la etapa en la que soñamos que es la necesaria para el cerebro; entonces van a ser más lentos en el día".
Entre las recomendaciones para dormir mejor, Haro sostuvo que hacer ejercicio durante el día, retirar el consumo de líquidos tres horas antes de dormir para evitar ir al baño, cenar ligero e identificar la forma en que prefiere dormir. "Cerrar los ojos, concentrarse en la respiración y sentir el flujo del aire ayudará a dormir. Alejar todos los dispositivos es vital porque la estimulación luminosa afecta el dormir y da más sueño ligero, que profundo. No ver la hora en la noche porque despertamos cada 90 minutos después de soñar y ver la hora, dará la sensación de que no hemos dormido".