Evelin Aguilar Paniagua
Olvido anormalmente rápido, menor recuerdo de experiencias cercanas y pérdida de conocimientos sobre el significado de palabras son solo algunos de los síntomas que presentan quienes sufren de Alzheimer.
Tanto por esta enfermedad como por otros tipos de demencia, 171 tarapaqueños están bajo control en el sistema de salud público, de los cuales -de acuerdo al reporte preliminar de 2017- 59 presentan un nivel leve de la patología; siete, moderado; y 105, avanzando.
Esta realidad local fue revelada por la Seremi de Salud cuyo titular, Manuel Fernández, advirtió que en la región, al igual que a nivel nacional, existe una tendencia al alza de personas que están bajo control por algún tipo de demencia. Es así que mientras la tasa en 2015 era de 43,06 casos por cada 100 mil habitantes, el 2017 pasó a ser 50,77, aunque aún las cifras correspondientes a dicho año son preliminares.
"El grupo etario mayormente afectado por Alzheimer y otras demencias corresponde a personas de 60 años y más", precisó la autoridad regional.
En el marco de la reciente conmemoración del Día Mundial de la Salud Mental, la Seremi lanzó la guía "Envejeciendo contigo", un trabajo desarrollado en conjunto con el centro transdisciplinario "Envejeciendo Juntos".
En esta, los adultos mayores responden a preguntas respecto a los cambios que han experimentado sus cuerpos, entorno social y familiar; así como a nivel psicológico, además de indicar sus hábitos de alimentación, y actividad física, problemas de memoria, atención, organización y lenguaje. Asimismo, se entrega información sobre la demencia y los signos de alerta que indican que la persona puede padecer de Alzheimer.
Detección
Marcela Véliz, fonoaudióloga y directora de "Envejeciendo Juntos", sostuvo que si bien la incorporación de este tipo de patologías al Auge es un avance importante porque garantiza el diagnóstico y el tratamiento, es necesario centrar esfuerzos en la detección temprana de estas enfermedades.
Y es que dijo que, una de las dificultades, es que se suele confundir los síntomas de Alzheimer u otra demencia con los signos normales del envejecimiento y que afectan a la memoria, atención, lenguaje y funciones cognitivas. Por ello recalcó que es fundamental que los familiares de adultos mayores consulten al médico ante cualquier duda.
Además, dado que el Alzheimer es una enfermedad neurodegenerativa, Véliz recordó que los deterioros se pueden mantener, más no revertir. "Esto se puede lograr no solo con estimulación cognitiva sino también tiene que haber trabajo de participación social, mantener vínculos, hacer actividad física, alimentarse sanamente, tener una espiritualidad que permita estar tranquilo...", puntualizó.
Desapariciones
Uno de los problemas que afrontan las familias de personas con Alzheimer es el extravío.
Según informó el jefe de la Primer Comisaría de Iquique, Claudio Pavez, de un total de ocho adultos mayores denunciados por presunta desgracia en lo que va del año, cuatro presentaban esta enfermedad. Todos estos casos se solucionaron y el tiempo de aparición de estas personas fue de uno a tres días.
Signos normales del envejecimiento
Fuente: Marcela Véliz
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Síntomas de alerta de Alzheimer
Perder la atención simultánea. Ejemplo: Debe esforzarse para concentrarse en la conversación que sostiene con una persona y así no distraerse con los diálogos que escucha cerca.
Afectación de la memoria de corto plazo y del trabajo. Ejemplo: Estar preparando los alimentos, suena el timbre, va a abrir la puerta, y deja la cocina prendida.
Dificultad para regularse. Ejemplo: Increpar a una persona por estar mirándola.
Que se olviden algunas palabras o nombres de personas. Ejemplo: Cuando se quiere referir a una persona, la describe, pero no puede recordar cómo se llama.
Tener dificultad para mantener la atención. Ejemplo: Conversar con una persona, de repente distraerse y luego retomar el diálogo sin recordar qué estaban hablando.
Cuando se producen errores sistemáticos en distintos ámbitos y esto comienza a afectar la funcionabilidad. Ejemplo: Olvidarse de ir a buscar al nieto a la escuela, cuando todos los días lo hace.
Cuando la dificultad para autorregularse comienza a invadir los espacios de otros y a generar problemas. Ejemplo: Querer agredir a una persona por no estar de acuerdo con ella.
En Alzheimer, el lenguaje se pierde en la etapa más avanzada de la enfermedad. Ejemplo: No recordar cómo se escribe una palabra.