Una pena de cinco años y un día de presidio mayor en su grado mínimo, fue la condena que el Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Iquique determinó para Eduardo Lozano Marambio (36), acusado del delito de tráfico ilícito de estupefacientes.

El imputado fue detenido el 20 de diciembre del 2018, tras una investigación realizada por la Fiscalía de la capital regional y personal de Directemar de la Armada de Chile, que dio cuenta de que Lozano se dedicaba a la comercialización de droga en la modalidad de delivery, esto quiere decir, "recepcionar llamados y realizar entregas de la misma utilizando un vehículo que era abordado por los compradores para luego dejarlos unas cuadras más adelante", informó el fallo.

Junto a la labor de la Brigada Antinarcóticos de la Policía de Investigaciones (PDI), se logró la fiscalización del hombre y del vehículo en su propio domicilio, luego de realizar las respectivas ventas.

En el auto se encontraron bolsas que contenían 3,9 gramos de cocaína y más de 7 gramos de marihuana, además de dinero en efectivo. En su poder mantenía la suma de $242.000 y en su hogar se incautaron casi 678 gramos de cocaína base y 21 gramos de cocaína.

Los antecedentes evidenciaron que tenía una condena como autor del mismo delito, por lo que el juez determinó que su libertad era un peligro para la sociedad.

+1 kilo en cocaína, cocaína base y marihuana encontraron en su domicilio y vehículo.

Un joven de 17 años fue acusado del delito de hurto en el Tribunal de Garantía de Iquique, tras protagonizar un robo en un local comercial de dicha comuna, el pasado lunes en horas de la madrugada.

Ayer el individuo identificado con las iniciales J.C.S.C. pasó a control de detención, donde el fiscal a cargo entregó mayores detalles de lo acontecido que involucra también a terceras personas.

Formalización

El hecho se habría producido cerca de las cinco de la madrugada, cuando J.C.S.C. junto a otras personas aún no identificadas, supuestamente ingresaron a una botillería del sector oriente de la ciudad, con el objetivo de sustraer especies.

Botellas de alcohol avaluadas en $1 millón fueron sacadas del lugar y trasladadas hasta otro domicilio. Todos estos movimientos fueron registrados por la central de cámaras del municipio, por lo que dieron la alerta a Carabineros.

De esta manera se procedió a detener a uno de los individuos, quien es menor de edad. Por esa razón, quedó a la sujeción del Servicio Nacional de Menores (Sename) y con la prohibición de acercarse a dicho domicilio. La jueza estimó un plazo de investigación de 80 días.

Francisca Cabello Iriarte

En prisión preventiva quedaron dos jóvenes de 19 y 23 años de edad, quienes están siendo acusados del delito de porte ilegal de arma de fuego, tras el hecho ocurrido el pasado domingo en horas de la madrugada, al sur de la ciudad de Iquique.

A pesar de que la formalización se llevó a cabo el mismo día, se amplió debido a que faltaban pruebas científicas para puntualizar la vinculación que ambos tenían con lo sucedido, las mismas que se dieron a conocer ayer.

Las cámaras municipales alertaron a personal de Carabineros sobre la presencia de tres individuos que estaban frente a una discoteque en Bajo Molle y uno de ellos, exhibía el arma apuntándola hacia el cielo, a vista de los transeúntes que pasaban por el lugar.

Todos ellos se subieron a un vehículo en dirección al norte y cuando personal policial intentó fiscalizarlos, a la altura de Reina Mar con avenida La Tirana, comenzó la persecución que terminó con una balacera en el sector de la Caleta Caramucho.

En este contexto, los individuos expulsaron el arma hacia la vía, la cual fue periciada y resultó ser una pistola marca Glock 17, calibre 9 milímetros y que además mantenía 12 proyectiles en su interior, pero el número de serie había sido borrada.

Kilómetros más hacia el sur se logró la detención de los dos imputados, no así del conductor del vehículo, quien huyó entre la balacera que protagonizó con carabineros, dando cuenta de que poseía una segunda arma.

Análisis

Luego de los informes que se realizaron, el fiscal a cargo aseguró que el arma recuperada mantenía evidencias de que habría sido disparada recientemente, lo que además fue argumentado con muestras del vehículo.

También se realizaron peritajes químicos de los mismos acusados que arrojó positivo ante "procesos de disparos, cercanía a este y/o manipulación de arma de fuego", puntualizó el Ministerio Público.

Sobre sus antecedentes, el joven de 23 años (C.V.T.) tenía una condena de lesiones menos graves el año 2017, mientras que D.A.E. (19) registraba irreprochable conducta anterior. En la audiencia se estimó un plazo de investigación de 90 días.