Daños al Gigante de Tarapacá
Nuevamente el geoglifo del Cerro Unita, conocido como el Gigante de Tarapacá, es intervenido por turistas. Esta vez fueron dos ciudadanos rusos que llegaron al sector y decidieron recorrerlo, pese a que la señalética en el ingreso daba cuenta de que no se podía circular.
Pese al daño es necesario reconocer que se trataría de algo menor respecto a quienes en 2019 ingresaron con vehículos todo terreno al lugar. Pero del mismo modo es importante los ajustes que se hicieron en el lugar, donde se han instalado señaléticas, cámaras de vigilancia y una caseta para un vigilante que permiten poder captar a quienes han hecho algún tipo de intervención y que esto no quede impune.
En este sentido, se debe reconocer el avance, pero también debemos mejorar la difusión respecto al daño que se hace en caso de acercarse al geoglifo, uno de los más importantes de la zona por sus dimensiones, pero que sin embargo, no es el único.
El Ministerio de Bienes Nacionales ya declaró el Cerro Unita como Bien Nacional Protegido, lo que permitirá resguardar el valor patrimonial y la gestión territorial de ese lugar, donde además hay un conjunto de 21 geoglifos. La administración del sitio quedará en manos de Bienes Nacionales y es de esperar que se pueda poner en valor como un lugar turístico, pero tomando los recaudos correspondientes.
Es necesario avanzar hacia un mejor cuidado de nuestro patrimonio histórico, sobre todo del arte precolombino, con el cual se puede conocer más de nuestra historia. Al mismo tiempo es necesario darle vida estos sitios, que las nuevas generaciones los conozcan y que estos dibujos sigan cumpliendo la función de comunicar para lo cual se realizaron.
Debemos como región ser capaces de poder potenciar nuestros sitios arqueológicos y que no solo nos enteremos de ellos cuando exista un daño, el que muchas veces se realiza por desconocimiento de su valor histórico.
El Gigante de Tarapacá es un ícono, pero existen cientos o miles de otros lugares en la vastedad de nuestro desierto que pueden ser valorizados a través de mejores señaléticas y coordinación con las comunidades locales.
"La administración del sitio quedará en manos de Bienes Nacionales y es de esperar que se pueda poner en valor como un lugar turístico".