Evelin Aguilar Paniagua

Tres insólitos casos son tratados en el Servicio de Cirugía Plástica y Quemados del hospital regional donde, en los dos últimos meses, ingresaron tres pacientes que fueron víctimas de delincuentes quienes, en el intento de robarles, les arrancaron el pabellón auricular y la nariz a través de una mordedura.

El más reciente corresponde al de la ciudadana boliviana Sara Zelaya (28) quien llegó a Iquique de vacaciones sin imaginar que un hombre le mordería y le arrancaría la punta de la nariz para arrebatarle su mochila.

Según dice, esto ocurrió hace dos fines de semana cuando junto a su esposo y cuñada retornaban de madrugada a la habitación en que se alojaban. Iban caminando por el centro de la ciudad y de repente unas seis personas, entre hombres y mujeres, los comenzaron a atacar.

"Eran unas personas morenas, altas, nos agarraron y nos quisieron robar. Empecé a forcejear, solamente sentí un golpe que me dio en la cara, empecé a sangrar y él empezó a correr (atacante). Fui a la pieza, me vi al espejo y no tenía la punta de la nariz. Mi marido volvió a buscarla para ver si la recuperamos, pero ya no se podía hacer nada", contó y afirmó que decidió no denunciar a Carabineros por temor.

Tras acudir a urgencias del hospital, la paciente fue derivada al Servicio de Cirugía Plástica y Quemados donde fue sometida a una primera cirugía para poder cubrir la punta de la nariz que quedó expuesta. El jefe de dicho servicio, Marcelo Fonseca, explicó que se empleó cartílagos locales y un colgajo de piel de la frente de la paciente para hacerle una nueva punta nasal. "Después de eso hay que esperar que los vasitos (sanguíneos) comiencen a irrigar, eso demora entre dos a cuatro semanas, y después cortar la piel que te sobra y devolverla a la frente", detalló.

El otro caso que recibieron en enero pasado fue el de otra mujer a quien de una mordida le arrancaron el pabellón auricular, mismo ataque que sufrió un hombre en diciembre pasado.

En ambos pacientes el procedimiento que se realizó fue "enterrar la oreja con un colgajo retroauricular para que el cartílago no se muera (...) Para que el tejido prenda hay que dejar esperar por lo menos un mes y medio". Tras ello, serán sometidos a una segunda cirugía en la cual se les reconstruirá la oreja con cartílago de la otra.

Las tres personas ya se encuentran de alta y acuden a controles al hospital de Iquique.

Fonseca recalcó que si el hospital no contaría con el Servicio de Cirugía Plástica, estos pacientes hubiesen quedado con la zona afectada expuesta, deberían haber sido derivados a Santiago y mientras eso ocurriera, por ejemplo, en el caso de la nariz, el cartílago moriría y "la perdería, y la cara es la carta de presentación de las personas".

Desde Carabineros informaron que en lo que va del año no tienen denuncias respecto a este tipo de casos en la región.