Corredor pretende llegar hasta Alaska promoviendo la lengua de señas
Deportista argentino partió su aventura el año pasado en Ushuaia y solo usa la fuerza de sus piernas para avanzar.
Unir las tres Américas es el sueño de Juan Pablo Savonitti (38), un ciudadano argentino que el primer día del año 2019 comenzó una aventura que lo tiene actualmente corriendo con el objetivo de llegar al extremo norte del continente.
Su anhelo es unir esta gran extensión de tierra usando solo la fuerza de sus piernas y ningún vehículo de transporte con el objetivo de promover la lengua de señas, y para ello partió su travesía en Ushuaia, Tierra del Fuego, Argentina, para finalizar en la bahía Prudhoe, en Alaska.
"Yo antes de iniciar esta travesía me dedicaba a competir en carreras de montaña en Europa, que fue donde viví los últimos 19 años, pero llegó un momento de que me cansé de querer competir y querer ganarle al otro. Por eso decidí unir las dos pasiones que tengo, que son correr y viajar", explica el trasandino.
Su espíritu aventurero se sumó al hecho de que es hijo de padres sordos y por eso decidió promover la lengua de señas en medio de su viaje.
"Lo que hago es correr entre 45 y 60 kilómetros al día, y como no tengo apoyo logístico ni sponsor, después de correr una buena cantidad de kilómetros apago el GPS en algún letrero, de esos que marcan los kilómetros en la ruta, y lo uso como punto de referencia. Me pongo a elongar y empiezo a hacer dedo para llegar a un pueblito o ciudad más cercana. Allí almuerzo y tomo desayuno. Al otro día me devuelvo a ese mismo cartel y arranco de nuevo hacia el norte", comenta sobre los detalles de su travesía.
Corre entre cuatro y cinco días consecutivos y luego descansa tres o cuatro para posteriormente tomar sus pertenencias y seguir avanzando hacia su objetivo.
El argentino cuenta que sus únicos acompañantes son dos bolsos grandes y una mochila de 30 litros, artículos que se quedan en la base mientras corre. En medio de la ruta, en tanto, solo porta un chaleco de hidratación, un sándwich, unas barras de cereal, una linterna frontal, una chaqueta impermeable y otra para el viento.
El denominado "ultrarunner" ya pasó por Argentina, entró a Chile por el Paso de Jama y luego avanzó por San Pedro de Atacama, Calama y Quillagua.
Se acerca a iquique
Ayer fue un día de descanso para Savonitti, pero estuvo ocupado en trasladar sus bolsos desde María Elena, en la Región de Antofagasta, hasta Pozo Almonte. Al lado del camino hizo dedo, le costó encontrar un transporte, pero finalmente logró llegar a la capital de Tamarugal.
A su arribo rápidamente se reunió con los integrantes de la escuela de atletismo de Pozo Almonte, quienes le dieron una calurosa bienvenida.
Planea quedarse unos días en la comuna de Pozo Almonte, donde consiguió alojamiento y alimentación en La Tirana gracias a las gestiones del alcalde Richard Godoy.
El corredor descansará el fin de semana y pretende iniciar su camino hacia a Iquique este lunes. En la ciudad le gustaría realizar una charla sobre concientización sobre la lengua de señas, en un lugar que permita la participación masiva de gente y que además tenga acceso universal.
En la capital regional también pretende encontrar un trabajo, porque sus recursos son cada vez más escasos. Sin embargo, su idea es aportar el cuarenta por ciento de lo que reúna para donarlo a la Federación Mundial de Sordos, cuya sede está en Helsinki (Finlandia).
"motivado"
Entre los episodios más complejos de su travesía enumera su cruce hasta Chile por la frontera, donde corrió a más de 5 mil metros sobre el nivel del mar y ante un inclemente clima. Por el contrario, revela que los momentos más reconfortantes son las relaciones que establece con la gente que va conociendo en el camino, a quienes les manifiesta la importancia de la lengua de señas para el mundo.
Confiesa que su aventura a veces se torna difícil, pero afirma que de alguna manera u otra los acontecimientos resultan a su favor. "Estoy súper motivado y no me pregunten cómo, pero las cosas se van dando. Puede que se alineen los planetas o tal vez uno desea tanto las cosas que todo resulta", destaca.
La aventura continúa para el argentino, una que recién comienza, ya que tiene presupuestado llegar a Alaska en 26 meses más. No obstante, mientras recorre América hacia el norte siempre encontrará motivos para llenarse de energía y cumplir su trascendental meta.
"Estoy súper motivado y no me pregunten cómo, pero las cosas se van dando".
Juan Pablo Savonitti,, corredor que avanza desde Tierra del Fuego a Alaska."