Romel J. Puche
Con la medida cautelar de prisión preventiva por ser considerada su libertad como un peligro para la seguridad de la sociedad, quedó un joven de 18 años identificado por las iniciales D.J.N., quien fue formalizado por la Fiscalía por su vinculación a un robo armado.
Los hechos por los cuales el persecutor comunicó cargos ocurrieron a las 2:00 horas de la madrugada de ayer, en la intersección de la avenida Luis Emilio Recabarren con calle Las Achiras, en Iquique.
La fiscalía informó que el sindicado en compañía de un segundo hombre, hasta ahora desconocido, abordaron a dos víctimas que transitaban a pie, a quienes habrían amenazado con una aparente arma de fuego y un cuchillo tipo mariposa.
La abogada de la fiscalía Kelly Pérez agregó que la pareja acusada logró robar un teléfono celular, para luego huir a bordo de un auto cuyas características y patente lograron ser divisada por los afectados. "El vehículo se trató de un Toyota modelo Vitz, el cual fue controlado cuatro horas después de ocurrido el robo en la avenida Ramón Pérez Opazo", preciso la persecutora.
Pérez contó que al descender del vehículo el imputado, que iba de copiloto, este lanzó a la vía pública la citada arma de fuego que está siendo analizada por la policía uniformada, para determinar si estaba o no apta para el disparo.
En el procedimiento se logró recuperar además el cuchillo que habría sido usado en el asalto y el teléfono celular sustraído.
Las víctimas indicaron que el detenido era uno de los asaltantes. Del segundo participante hay un sospechoso, pero la fiscalía no cuenta con las pruebas suficientes para vincularlo al hecho.
La defensora penal pública Carolina Lagos, representante del imputado, presentó una tesis alternativa otorgada por su cliente, quien negó estar vinculado al robo con intimidación que le imputan.
"Mi representado me indicó que en la madrugada este amigo que conducía el vehículo lo pasó a buscar, y al subir al mismo no se percató que en el asiento del copiloto estaba esta arma que aparentaba ser de fuego, posteriormente al ser fiscalizado por Carabineros y descender del auto, el arma al parecer se habría caído pero no es que él la haya tomado y lanzado", dijo la defensora.
Al término de las alegaciones el juez de garantía Frederick Roco procedió a resolver. El magistrado razonó en favor de la Fiscalía al existir una sindicación directa de ambas víctimas respecto del detenido, a quien la policía relacionó además directamente con el porte del armamento usado en el robo, por lo que decretó la prisión preventiva durante la investigación.
60 días de investigación asignó el tribunal para las indagaciones a realizar del caso.