Cuarentena total

En siete comunas de la Región Metropolitana se determinó una cuarentena total ante el aumento del contagio de COVID-19.

El Ministerio de Salud (Minsal) informó que los fallecidos subieron a cuatro y que los contagios aumentaron a 1.306 a nivel nacional, luego de constatar a 164 casos nuevos.

En Tarapacá se mantienen en cinco el número de personas confirmadas con el virus, donde además hay más de 100 que deben permanecer en cuarentena, las que son fiscalizadas por funcionarios de salud.

Y aunque el mayor número de contagios está en la Región Metropolitana y es donde se determinó la cuarentena total, el mismo ministro de Salud, Jaime Mañalich, afirmó que las regiones de la zona centro sur y sur del país son las que más preocupan, por el aumento de los contagios.

Pese a ello en Tarapacá y en la zona norte se mantiene el contagio en cifras muy reducidas, con solo un 4% del total país desde Coquimbo a Arica.

Por lo anterior es importante ser cautos con medidas como las de cuarentena total. Si bien es una herramienta para frenar el contagio, estas medidas son de acuerdo al aumento de casos y, sobre todo, por tiempos limitados.

Si bien las autoridades locales no la descartan, el general Guillermo Paiva fue claro la mañana de ayer, al expresar que es algo que está dentro de las facultades, pero por el momento no está en los planes.

En el caso de una cuarentena total, como la que se definió en las comunas más afectadas de la Región Metropolitana, incluye hasta 6,3 pacientes confirmados por kilómetro cuadrado. Aunque lo deseable es no llegar a esos extremos en la región, es importante que las medidas sean proporcionales y que se apliquen para evitar un brusco avance de la pandemia.

Actualmente la región está casi paralizada productivamente, a la orden que hay solo cinco contagios, lo que a nivel nacional se comenzó a dar cuando la crisis ya sumaba un fallecimiento.

Si logramos mantener las normas de higiene y de evitar el contacto social, será más fácil mantener a raya el virus y minimizar las medidas extremas. Depende de todos.

"Si logramos mantener las normas de higiene y de evitar el contacto social, será más fácil mantener a raya el virus".

El miedo persiguió desde su nacimiento al notable filósofo Thomas Hobbes, su madre le dio a luz prematuramente ante el temor de la invasión española a Inglaterra. Posteriormente, Hobbes fue testigo de las guerras civiles que afectaron a su país a mediados del siglo XVII, entre realistas y parlamentaristas. Incluso él mismo sufrió de las persecuciones, quemaron sus libros y debió exiliarse en Francia. Tenía terror de la muerte violenta, en esa época los hombres solían portar armas, por tanto, decidió enclaustrarse para concluir su obra llamada Leviatán, la que tendría una influencia decisiva en el pensamiento político moderno. Con Hobbes la teoría del Estado llegaría a su máximo nivel, complementada después con el pensamiento de John Locke y J.J. Rousseau. Del pensamiento de Hobbes surge la idea que la única violencia legítima proviene del Estado. Consideraba que el derecho natural les otorgaba a las personas una libertad riesgosa, por ello (siguiendo a Isaiah Berlín) pensadores como Locke, Mill, Constant y Tocqueville, consideraban que debía siempre existir un mínimo de libertad personal que no podía ser violado bajo ningún concepto. Allí, la importancia de del contrato social.

Hoy, en el mundo, a pesar de que la idea de un contrato social se volvió imprescindible para la convivencia humana, no hemos dejado de tener miedo de las acciones violentas de los hombres, sean guerras, atentados, represiones, fanatismos, etc. Las guerras han generado millones de muertos. Al igual que la conducta humana (que será siempre la más riesgosa para la propia especie), el comportamiento de un virus global requiere ser analizado sociológicamente para comprenderlo y tomar las medidas correspondientes. Vemos que las medidas suelen ser tomadas precisamente por ese Estado moderno (Leviatán) que nació del pensamiento liberal de los siglos XVII y XVIII. En este siglo XXI, nuevamente vemos el dilema de Hobbes: los individuos se resisten a las decisiones que afectan su libertad, basta observar lo acontecido en Italia y España. Al parecer, hemos avanzado mucho tecnológicamente desde el siglo XVII, pero seguimos haciéndonos las mismas preguntas frente a los mismos temores. El temor ante una pandemia a escala planetaria, irónicamente, obliga a las personas -al igual que Hobbes- a enclaustrarse para evitar una posible muerte, quizás no violenta, pero no por ello menos trágica.

"Seguimos haciéndonos las mismas preguntas frente a los mismos temores"

Sergio González Miranda,, Premio Nacional de Historia 2014"

Mascarillas

El uso de mascarillas se ha generalizado en el último tiempo. Ya parece una verdadera moda de la prevención. Es importante, sin embargo, que quienes las usen la desechen de manera adecuada y se use solo hasta que se humedezca.

Cuarentena

La cuarentena es un sistema que permite aislar a los enfermos, es decir, los que tienen el virus para que no contagien al resto. Hoy hay más de 100 personas que podrían estar contagiadas por estar en contacto con los positivos. Ellos deben cumplir al pie de la letra las indicaciones.

Tareas

Aunque muchos colegios mandaron una serie de trabajos para que los niños hagan en sus casas, el ambiente en el hogar no es el más óptimo, sobre todo para los más pequeños. La labor pedagógica es de profesionales y no se puede dejar a los padres, sino se generan desigualdades.