Bolivianos presionan para ingresar a su país en Colchane
Sorteando los controles carreteros, en buses y con trayectos de varios kilómetros caminando cerca de 500 bolivianos llegaron hasta el control fronterizo de Colchane, en la Región de Tarapacá, para presionar al gobierno y los deje pasar a su país tras el cierre de fronteras.
La mañana de ayer los bolivianos que pernoctan en el Hito 61 protestaron frente a un grupo de 150 efectivos militares quienes los obligaron a retroceder.
Según el alcalde de Colchane, Javier García, los bolivianos "llegaron durante la noche del lunes, algunos caminando, entre niños, mujeres embarazadas y hubo enfrentamientos con el ejército boliviano y un ciudadano boliviano le arrebató el arma a un uniformado de Bolivia y le hizo una herida en la cabeza con el arma, también hubo una persona desmayada que fue atendida en el consultorio".
Agregó que en Colchane están viviendo una situación muy compleja porque continúa llegando gente que intenta retornar a su país. "Recordemos que el complejo fronterizo boliviano no permite el ingreso de sus ciudadanos. Ellos habían habilitado el paso para la gente, pero al parecer está repleto y no pueden recibir más personas por lo que se sabe. Recibieron a 480 ciudadanos bolivianos que están en cuarentena en Pisiga Bolívar, sin embargo aquí hay 500".
El edil manifestó su preocupación por el abastecimiento de los almacenes de la localidad, que en Colchane tienen una población de 1.600 habitantes, pero debido a la pandemia cuentan con 4 mil personas, que han retornado a su pueblo desde las zonas urbanas de la región y también desde Arica.
"Le solicité personalmente al general Paiva el cierre de las fronteras y también un control estricto para el acceso de la comuna, sin embargo no fue acogida. Luego presenté un recurso de protección en la Corte de Apelaciones y hasta el momento no he recibido respuesta, menos del Gobierno Regional".
Por su parte, Moisés Arancibia, de la Brigada de Rescate y Emergencia Húsares, informó que en Alto Hospicio hay alrededor de 30 ciudadanos bolivianos que no pudieron ingresar a su país, a quienes de manera voluntaria le facilitaron un refugio momentáneo.
"Una señora nos facilitó un espacio para poder albergar a las personas que no tenían donde dormir y están ahí con el apoyo voluntario que llega de parte de la iglesia y gente que tiene buen corazón, pero lamentablemente no hemos recibido ayuda de ninguna autoridad. Hace más de cuatro días que el consulado boliviano está cerrado, entonces no sabemos qué hacer, la gente está desesperada".
El intendente Miguel Quezada, manifestó que "el gobierno regional está monitoreando la situación que se registra en la zona fronteriza de Colchane(...) Abogamos por una pronta solución".
500 ciudadanos bolivianos están en el hito fronterizo de Colchane, a la espera de entrar a su país.