Rodolfo Capino Valencia
La instalación de cortinas transparentes es una de las medidas más drásticas que han adoptado los encargados de pequeños negocios de Iquique, para protegerse de los contagios del coronavirus ante la alta afluencia de público durante todo el día en esos establecimientos.
Forros de cortina de baño son los elementos usados en los almacenes y minimarkets para ese efecto, los que unidos a cuerdas y clavos forman una especie de cerco entre los dependientes y los clientes. Los productos son entregados mediante una abertura estrecha y alargada, y en algunos casos hasta la habilitación de una "ventanilla" sirve para entregar los artículos a las personas.
El minimarket Maktub implementó esa medida de prevención. Cecilio Caicedo, encargado del local, comentó que la semana pasada instalaron una cortina transparente en los mostradores del establecimiento, cuando ya habían adoptado el uso de mascarillas y el lavado frecuente de manos.
"Antes de poner las cortinas arriba de los mostradores, pusimos la misma cortina transparente a la entrada del negocio y abrimos una ventanita, pero no resultó porque bajaron las ventas. Por eso decidimos hacer lo mismo pero adentro", explicó el comerciante.
Caicedo indicó además que buscan evitar lo más posible algún tipo de contaminación y que debido a ello, por ejemplo, son ellos mismos quienes eligen los panes para los clientes usando pinzas.
La misma estrategia aplica Juan Carlos Rojas, encargado de la botillería El Tío, quien manifestó que hace dos semanas instaló la cortina transparente en el mostrador principal del recinto, debido a que durante todo el día atiende a un alto flujo de personas. "La idea es protegernos si una persona estornuda o toce. Vimos esta misma instalación en otro negocio, nos llamó la atención y lo implementamos", afirmó.
No obstante, antes de colgar la cortina de PVC empezaron a usar mascarillas y guantes de látex, además limpian constantemente el mesón de atención a público.
El vendedor de la botillería también contó cómo la clientela reaccionó ante este nuevo modo de atención: "Fue bastante bien recepcionado. De hecho, mucha gente nos felicitaba porque estábamos en pro del cuidado contra el coronavirus".
Las cortinas traslúcidas también están instaladas en el minimarket Playa Brava. Mónica Peredo, dueña del establecimiento comercial, narró que hace cuatro semanas instalaron la barrera que pretende impedir el paso del virus. "La gente estaba muy contenta porque nos decían que podían venir a comprar con tranquilidad", enfatizó la comerciante.
Peredo dijo también que, junto a la citada medida de prevención, su personal usa mascarillas y guantes para atender al público y además ocupan alcohol gel. "Incluso cuando hay muchos clientes les pedimos que entre la menor cantidad de gente posible por prevención", añadió la emprendedora.
"La gente nos ha felicitado por la medida porque no en todas partes han hecho esto. Lo ideal es que todos nos protejamos, porque tanto nosotros como los clientes somos eventuales agentes contaminantes", enfatizó Peredo.
"La gente nos ha felicitado por la medida porque no en todas partes han hecho esto. Lo ideal es que todos nos protejamos".
Mónica Peredo,, dueña del minimarket, Playa Brava."