"Lo que tenemos no sirve, es una especie de monarquía o zarismo constitucional"
El legislador de oposición aborda las pugnas entre el Ejecutivo y el Congreso, critica las respuestas, a su juicio tardías, ante la pandemia y cree que no se debió llegar al punto de discutir un proyecto como el del retiro del 10% de las AFP.
Entre las consecuencias de la pandemia del coronavirus, una de las más complejas ha sido la serie de disputas entre el Poder Ejecutivo y el Legislativo sobre los proyectos de ley y su admisibilidad: desde regular la propia validez legal hasta normas concretas, como el postnatal de emergencia y, más recientemente, el del retiro del 10% de las AFP.
El senador PPD Guido Girardi, médico y miembro de la Comisión de Salud del Senado, asegura que ha estado preocupado por todas estas complejidades, al punto de que presentó, junto a otros senadores de oposición, un proyecto para limitar lo que en su sector consideran un "presidencialismo exacerbado" chileno. Aquí también opina sobre los orígenes de la pandemia, las medidas que se han tomado y el futuro.
-Se dice que esta pandemia responde a la actividad disruptiva del hombre en el medio ambiente. ¿Comparte esa idea?
-Lo que vivimos es consecuencia de la crisis ecológica que vive el planeta. Las mismas razones que están detrás del calentamiento global, que significa la alteración de los ecosistemas, los cambios de temperatura, la acidez de los océanos, todo eso también afecta a la trama de seres que constituyen la vida de la Tierra. Todo esto también genera el aumento en la mutación de las células humanas (así aumentan los cánceres), pero también se incrementan las mutaciones de todos los virus y bacterias que habitan en el planeta. Los seres vivos tienen más virus y bacterias que células propias.
Girardi explica que "lo que está haciendo esta alteración de los ecosistemas es que cambia la tasa de mutación de los virus y empiezan a adquirir características que no tenían y a recombinarse entre ellos. Y como hay un hacinamiento total entre seres humanos y animales que antes estaban separados -actualmente conviven miles de millones de pollos, con miles de millones de cerdos y miles de millones de seres humanos, todos juntos-, se transgreden fronteras y los virus de los animales pasan a los humanos (virus aviares, virus de murciélagos y de otros animales). El ser humano al comer pangolín o murciélago contacta virus que al mutar y recombinarse saltan de su huésped natural a los humanos, contagiándolos. Lo más probable es que las pandemias vuelvan. Lo que vivimos quizá no sea sino un signo más de un proceso de aceleramiento en que vengan muchas más pandemias en el mundo".
-El coronavirus ha puesto a prueba y en tensión a los sistemas de salud en Chile. ¿Cómo ha visto usted esta crisis sanitaria?
-Debemos entender que los sistemas de seguridad social, de salud, y otros sistemas para poder enfrentar este tipo de situaciones hay que reforzarlos al máximo. No sabemos cuánto va a durar esta pandemia y probablemente vengan otras. Pero además, este Gobierno ha tenido un pésimo manejo del tema. Normalmente los países que han tenido éxito en el control de la pandemia, a las 8 o 10 semanas la tenían más o menos controlada. Nosotros vamos a cumplir 5 meses, el doble de tiempo de lo que demoraba esto en China y más del doble de lo que demoró en Corea del Sur, que fueron 8 semanas.
"Por otra parte", indica el senador PPD, "está el agravante que, si nosotros hubiéramos extrapolado la situación de China, Chile no debería haber tenido más de 100 mil contagiados y ya tenemos cerca de 300 mil y no debería haber tenido más de tres mil muertos y ya tenemos más de 10 mil. O sea, es un fracaso total. Aquí lamentablemente lo que no se hizo en marzo, recién se está haciendo ahora con el nuevo ministro. Pienso que este Gobierno actuó con irresponsabilidad y negligencia en materia de trazabilidad: recién ahora se está aislando a los covid-19 positivos, recién ahora se está buscando a los contactos, recién ahora se está cerrando la cadena de contagios, recién ahora se está incorporando la atención primaria y recién ahora se están entregando las ayudas económicas. Tuvieron que pasar tres meses antes de que hicieran lo que tenían que hacer.
-¿Le parecen retrasadas también las medidas que se han tomado, como la ayuda a la clase media?
-Sí. Recién ahora se están entregando esas ayudas, como son el ingreso familiar de emergencia o la ayuda a la clase media, cuando debieran haberse entregado en marzo. Consecuencia de esto es que se esté discutiendo el tema del 10% de las AFP, porque si esto se hubiera resuelto como debiera haberse hecho y no intentando endeudar a la clase media, sino generando un ingreso de apoyo urgente, pero no tardío, no en estos días sino en marzo, muy distinta sería la situación y tal vez ya estaríamos en un mejor momento, en una curva de descenso o desconfinando la ciudad. Pero se ha hecho de la peor manera y con un fracaso total de la estrategia inicial, al punto que el propio ministro (Jaime) Mañalich lo reconoció y tuvo que venir un nuevo ministro con la necesidad de llevar adelante otra estrategia. Pero cuando ya se tiene una bola de nieve que ha crecido como este virus es muy difícil atajarla, por eso el ministro (Enrique) Paris ha tenido tantos problemas.
-¿Y los proyectos nacidos del Parlamento?
-Hemos presentado varios proyectos. Al estar en una situación extraordinaria, de catástrofe, hemos presentado la idea de fijar los precios de las isapres; un proyecto para impedir los cortes de suministro de agua potable, luz eléctrica, gas, telefonía fija y móvil, de internet para las personas, para que puedan cumplir sus medidas de aislamiento. Las medidas de apoyo social son para que la gente pueda quedarse en la casa, cumpliendo las cuarentenas; hemos presentado proyectos para regular las ferias; para establecer mecanismos de trazabilidad con inteligencia artificial. También hemos apoyado iniciativas como el uso de una parte de sus recursos en las AFP para poder paliar las situaciones dramáticas que están viviendo muchas personas, especialmente de clase media. El Gobierno en materia de ayuda social ha apuntado, aunque tardíamente, a la gente más vulnerable y ha abandonado a la clase media y sólo le propone medidas para que se endeude más, pero al ya estar endeudada no tiene posibilidad de tener más deuda.
-Ya que lo ha mencionado, al aprobarse inicialmente la idea de sacar un 10% de las AFP, ¿tiene sentido el argumento que sostiene que esto haría peligrar las pensiones futuras?
-No tiene ningún sentido. Primero, este proyecto se presenta en una situación excepcionalísima. Tiene que ver con que el Gobierno nunca se preocupó seriamente ni dio apoyo social de manera oportuna.