Calidad de vida

Queremos vivir más tiempo. La expectativa de vida ha aumentado en los últimos años tanto en los hombres como en las mujeres. Ahora debemos preguntarnos ¿cómo quiero vivir? ¿Qué tipo de vida quiero y espero? ¿En qué condiciones quiero llegar a la vejez?

Más importante que cuánto tiempo quiero vivir es cómo quiero vivir. Si quiero llegar a la vejez en buenas condiciones físicas, mentales y emocionales tengo que preocuparme de la calidad de vida que tengo y tratar de que ésta sea óptima, especialmente en cuanto a lograr el equilibrio emocional.

Primero tenemos que aceptar que somos humanos y no dioses y como tales tenemos cualidades y defectos, que no somos perfectos y nunca lo seremos.

Para apreciar la luz del día necesariamente hay que aceptar la oscuridad de la noche; para disfrutar de las alegrías hay que conocer la tristeza y el dolor; para que exista el bien tiene que existir la maldad, todas las cosas en el mundo tienen un lado positivo y uno negativo.

No es normal vivir en euforia ni tampoco con tristeza permanente, ya que esto indica un trastorno en la percepción de la realidad y una alteración en las emociones.

Cuando nos imponemos múltiples restricciones con el objeto de vivir más, al creer que así estaremos más sanos, vamos a caer en el mismo error que quienes abusan de las cosas. Unos se van a enfermar por abuso y los otros se enfermarán ya que al restringirse tanto no disfrutan las pequeñas cosas de la vida, el espíritu o alma o la esencia del ser humano se reprime y restringe y por esta causa aparece el desequilibrio emocional.

La calidad de vida no solo se afecta por los alimentos que comemos, las bebidas que ingerimos, si somos o no fumadores, si estamos o no estresados. Lo que tenemos que preguntarnos es el ¿porqué tengo esta conducta? ¿Fumo porque me gusta o por ansiedad o para evadirme de un problema? ¿Por qué sigo este tipo de dieta, porque me siento mejor o porque me dicen que así no me enfermaré? El problema está en como abordamos las cosas.

La clave para lograr una mejor calidad de vida está en la forma como enfrentamos la vida, intentemos tener una mirada positiva y optimista de la cosas.

Además, para que la vida tenga sentido hay que saber disfrutar sin abusar. Si queremos vivir más pero en buenas condiciones mentales, físicas y emocionales no podemos caer en los extremos, busquemos el equilibrio.

"Primero tenemos que aceptar que somos humanos y no dioses y como tales tenemos cualidades y defectos".

Dra. Solange Chía Fan

En el transcurso de este dramático año, un matutino capitalino de circulación nacional publico una entrevista al conocido filósofo francés

Eric Sadin sobre el mundo digital que revoluciona el planeta, el que merece una interesantísima crítica desde el punto de vista humanista. Allí señala que Sadin cree que el mundo digital nos está quitando el libre albedrío, vamos camino a la muerte del ser humano, tal como lo conocemos desde el Renacimiento: responsable , autónomo .

Agrega que el alma de ese mundo es Silicon Valley, donde se ha originado un espíritu que esta colonizando el orbe con la "siliconizacion" que menciona más como un nuevo tipo de capitalismo, es un modelo de civilización que se está instaurando a gran velocidad, fundado en la mercantilizacion de la vida" y la organización automatizada de sectores cada vez más numerosa de la sociedad. Frente a la pregunta si estamos dispuestos a sacrificar parte de nuestra autonomía y privacidad a cambio de los beneficios de las nuevas tecnologías, el filósofo responde: "Creo que lo que cuenta es entender el

desafío estructural y decidir en común si queremos o mantener ciertos

principios fundamentales que la digitalización del mundo está poniendo en peligro.

Pienso en el libre ejercicio de nuestra facultad de juzgar, el derecho a no ser continuamente reducido a un objetivo de mercado por los sistemas digitales , el uso de nuestra sensibilidad, respeto a la integridad y pluralidad humana. Son cuestiones de orden civilizatorio que debemos enfrentar sin demora".

Por último el periodista pregunta: ¿Qué hacer? El señor Sadin en una parte de la respuesta. expresa; "Contra ese asalto anti humanista, hagamos prevalecer una ecuación simple pero intangible: cuanto más se pretende apartarnos de nuestro poder de actuar, más necesario es ser activo".

Mario Zolezzi Velásquez

La excelentísima Corte Suprema de Justicia (así se estila calificarla) ha

impartido justicia. Rechazó la posibilidad de que una modesta maestra del país retire sus fondos de la AFP Cuprum, revirtiendo lo antecedido por la Corte de Apelaciones de Antofagasta. Es decir, es justo que la profesora que ganaba 1.200.0000 reciba ahora 185.000 pesos mensuales de su administradora AFP que, de paso, logró utilidades por 95 millones de dólares, sólo en 2019.

Este tipo de situaciones absurdas e incomprensibles, en donde una Corte no imparte justicia por estar los hechos amarrados previamente, no pueden seguir existiendo en un país con un 97% de alfabetizados. Por esto, una vez ganado el Apruebo en octubre, debe plasmarse en la nueva Constitución un rol fuerte del Estado, garantizando derechos básicos para todos sus habitantes: acceso a la salud, la educación y la vivienda y pensiones consistentes, de supervivencia.

No podemos continuar con una constitución como la actual que blinda a una fronda, llámese de políticos, a favor del sistema económico, dueños de AFP e Isapres, de medios de comunicación, banqueros y las élites de la FF.AA, entre otros, que se enriquecieron ofensivamente e impidieron todo cambio, invocando un bien superior que no era otra cosa que el propio interés privado.

Gaspar Millas del Río