Fiscalía apunta a un cabo como líder de banda que asaltaba a contrabandistas
El persecutor pidió la prisión preventiva para 13 ex carabineros implicados en el caso.
Un cabo segundo de Carabineros sería, según dijo la Fiscalía, uno de los líderes de una organización criminal dedicada a cometer asaltos en contra de contrabandistas de cigarrillos.
Así lo hizo saber en audiencia de formalización el fiscal Eduardo Ríos, quien acusó a la organización compuesta por civiles y ex carabineros como autores de los delitos de robo con violencia e intimidación, cohecho, contrabando, asociación ilícita y lavado de activos.
Dicha organización criminal, de acuerdo al persecutor, contaba con siete funcionarios de Carabineros activos al momento de los ilícitos, y fue desarticulada por la Unidad de Delitos Económicos y de Corrupción de la Fiscalía Regional de Tarapacá, junto a la Brigada Antinarcóticos y Contra el Crimen Organizado (Brianco) de la Policía de Investigaciones (PDI).
El fiscal a cargo del caso explicó en audiencia que la investigación logró establecer la existencia de la banda quienes operaron de manera concertada desde noviembre de 2017 hasta mediados del año 2019, con el propósito de facilitar el ingreso ilegal de cigarrillos al país, su traslado y su venta al interior de la región.
Según el fiscal también se habrían dedicado a interceptar camiones con cargamentos de cigarrillos de contrabando de origen boliviano, que eran introducidos por pasos no habilitados cercanos al complejo fronterizo de Colchane, con la finalidad de sustraerlos mediante intimidación o violencia, para luego distribuir dicha carga y venderla al menudeo en Alto Hospicio e Iquique, obteniendo importantes ganancias que se repartían entre los integrantes de la asociación ilícita.
Ríos señaló que a través de seguimientos, levantamientos patrimoniales, análisis de redes familiares, análisis financieros e interceptaciones telefónicas, se estableció que la organización era liderada por el imputado de iniciales S.M.C. y el cabo segundo R.A.R.S., quienes impartían órdenes y supervisaban las acciones de los miembros civiles y uniformados.
Agregó que estos últimos realizaban labores operativas, entregando a los líderes de la organización información acerca de turnos de garitas de control, advirtiendo la presencia de unidades policiales especializadas, interviniendo en la interceptación y sustracción de cigarrillos de contrabando, y aceptando beneficios económicos indebidos.
Para la concreción de todos los delitos dijo Fiscalía que la organización mantenía aparatos de radio frecuencia instalados en sus vehículos, una aplicación especial de walkie talkie para comunicarse en tiempo real, visores nocturnos, sensores de movimiento instalados en la ruta para detectar a los camiones que iban a ser sustraídos, cámara de vigilancia electrónica instalada en la tenencia de Huara que tenía un duplicado en el inmueble de uno de los jefes de la banda y armas tipo réplicas, "miguelitos", pasamontañas, balizas y autos policiales.
Prisión Preventiva
En la audiencia el fiscal Ríos detalló ocho robos con intimidación y violencia efectuados por los imputados en distintas fechas. Asimismo el persecutor solicitó la prisión preventiva de 16 imputados (13 de ellos ex carabineros) y a siete imputados se les solicitó el arresto domiciliario total. La maratónica audiencia que comenzó a eso de las 14 horas del pasado viernes, y que ameritó receso a medianoche, todavía no se resolvía ayer al cierre de esta edición.