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La muerte de abogado y taxista desata protestas contra la brutalidad policial

El presidente Duque repudió la fatal agresión, en el distrito de Bogotá.
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Leo Riquelme

"Ya, ya, por favor, por favor, por favor!", gritaba angustiado, como apagándose, un hombre que tenía encima a dos policías, que no cesaban de aplicarle descargas eléctricas.

"Les está diciendo que 'por favor', ¡los estamos grabando!", le gritaba a los uniformados un testigo, que captó todo lo que sucedió el miércoles en el barrio Santa Cecilia, en la localidad de Engativá, ubicada en el distrito de Bogotá, capital de Colombia.

El hombre murió más tarde en un centro asistencial. Fue identificado como Javier Ordóñez, un abogado de 44 años, padre de dos hijos y que se dedicaba a conducir un taxi mientras estudiaba también aeronáutica, según contaron familiares.

Su deceso desató durante la noche del miércoles y la madrugada de ayer durísimas protestas contra la brutalidad policial. Las manifestaciones dejaron al menos siete muertos y cerca de 150 heridos.

Según contó al canal CitiTV un amigo que compartía con Ordóñez al momento de los hechos, todo comenzó porque estaban bebiendo unos tragos en la vía pública. De acuerdo al testigo, Ordóñez le dijo a los policías que les cursaran una multa y los dejaran seguir departiendo.

"No pana, esta vez no se me salva (…) Ahí lo agarran a golpes, le dan los shocks eléctricos y de ahí vino lo que todos ven en el video", relató.

Según explicaron familiares, la víctima fatal vivía junto a sus dos hijos -de 15 y 11 años-, mientras que la madre de ellos reside en Barcelona, España. La mamá de Ordóñez, en cambio, vive en Argentina y por las restricciones del coronavirus se hace difícil que asista al funeral.

"Javier era un hombre muy sociable. Todo el tiempo estaba rodeado de gente, era una persona muy entradora, hablaba mucho", dijo al periódico El Tiempo su excuñada, Eliana Garzón.

"Él era el centro de las reuniones. Hacía reír a todos. Quiero destacar el corazón de oro que tenía Javier. Esto no es porque él se haya muerto, en vida lo destaqué, él tenía un corazón muy bondadoso", agregó

La difusión del caso provocó indignación entre los colombianos y llevó a las autoridades a separar a los dos agentes implicados. Además, organizaciones de derechos humanos condenaron lo ocurrido y exigieron sanciones ejemplificadoras.

"Debemos tener cero tolerancia con quienes deshonran el uniforme y abusan. Con los últimos hechos, debe haber investigaciones rápidas y que se apliquen las normas como tiene que ser", coincidió el presidente colombiano, Iván Duque.

El Ministerio de Defensa, en tanto, anunció que promoverá la realización de cambios en la Policía, "con el fin de tener una institución más fuerte y rodeada de respaldo y aprecio de los colombianos", explicó el ministro Carlos Holmes.

Las protestas nocturnas derivaron en la destrucción de comisarías y la quema de vehículos y contenedores de basura en Bogotá y otras localidades, además de duros choques entre manifestantes y la policía antidisturbios. "Así como condenamos el abuso policial, también condenamos la violencia y vandalismo por parte de algunos manifestantes. El abuso y la violencia no se soluciona con más violencia", dijo la alcaldesa Claudia López.