Los invisibilizados
El avance de la pandemia en el país y en nuestra región ha dejado huellas profundas. Diversos son los impactos sociales y económicos generados por la crisis sanitaria que enfrenta el país: el desempleo, las ollas comunes, el cierre de pequeños emprendimientos, el menor dinamismo, la pérdida de confianza y la mayor incertidumbre, son algunos efectos que están a la vista.
Y como suele ocurrir, los más desposeídos son quienes resultan más afectados por estas situaciones. Es algo que se puede advertir en las clases medias y las más pobres, que tienen menos recursos para lidiar con problemas de este tipo.
En el caso de las familias que están en los grupos más necesitados, por estos tiempos se ha visto cómo han surgido apoyos y una notable red de solidaridad y amistad. Pero aquello nunca será suficiente.
La crisis también comienza a reflejarse en un aumento en el número de personas en situación de calle en nuestras ciudades.
Se trata de una cuestión algo más dramática pues son personas habitualmente invisibilizadas para gran parte de la población, que los observa casi como parte del paisaje urbano. Detrás de ellos hay historias, dolores, familias y detalles que desconocemos por completo.
Quizás sea este uno de los mayores ejemplos del quiebre de una sociedad demasiado cargada al éxito y poco enfocada en los seres humanos, en su dignidad y cuidado.
Muchas de estas personas han perdido sus precarias fuentes de ingreso y han debido salir a vivir escondidos en distintos espacios de nuestras ciudades, con las complicaciones que eso implica.
Eso explicaría el notorio aumento del fenómeno en algunos puntos de la ciudad, en el borde costero, en parques y plazas y en muchos espacios e intersticios que se pueden encontrar en Iquique, en sus calles y sus edificios.
Estas personas no pueden quedar atrás, olvidados, invisibilizados. El poder resolver este tipo de desafíos, habla de la clase de sociedad que somos, y el aporte que desde lo individual, hasta lo institucional, con el Estado a la vanguardia, podemos hacer.
"La crisis también comienza a reflejarse en un aumento en el número de personas en situación de calle en nuestras ciudades".