opinión
Evitemos el estrés de fin de año
Falta menos de dos semanas para dar inicio a las celebraciones de fin de año y los escaparates de las vitrinas lentamente se van repletando de adornos navideños y ornamentaciones que nos recuerdan que pronto llegará la consumación de este ajetreado 2020. Sin embargo, el período que despedimos ha enviciado un antes y un después en nuestras vidas y en las del mundo entero. El azote sin piedad que ha propagado el virus que causa el patógeno denominado covid-19, conocido en el ámbito científico como SARS-CoV-2
Existe una gran acumulación de estrés y en especial en este año tan complicado. Este tipo de estrés se ve acentuado por la crisis sanitaria, social, laboral, emocional y comercial generada por el coronavirus.
Entre tanta agitación, el cuerpo nos envía señales de advertencia, las que, si no son escuchadas, nos pueden causar algún sobresalto.
La alteración emocional denominada síndrome de fin de año, es la encargada de colocar en broche de oro en este dificultoso periodo, si es que no se está atento a las señales fisiológicas que envía su cuerpo.
Cansancio, irritabilidad, insomnio, angustia, desórdenes alimenticios son algunos de los síntomas a los que debemos estar alerta. Asimismo, podemos padecer de taquicardia, falta de energía, mala memoria, cuello o mandíbula rígidos, baja concentración y dolor de cabeza, por esmerarnos en cumplir con las tareas e interminables obligaciones impuestas para las últimas semanas del año. Agregándose la aprensión de adquirir el patógeno covid-19. Además, este tipo de estrés afecta el sistema inmunológico disminuyendo nuestras defensas para afrontar enfermedades como el coronavirus.
Por eso es muy importante poder planificar correctamente las actividades, tanto en el ámbito laboral, como familiar. Detenerse y vislumbrar todos los posibles escenarios en donde las medidas sanitarias se respeten correctamente y hayan sido fiscalizados por autoridades sanitarias
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) podemos evitar el contagio en estas fiestas de fin de año, si adoptamos las siguientes medidas de precaución.
Por ejemplo, mantener el distanciamiento físico, llevar mascarilla, utilizar alcohol gel ventilar bien las habitaciones, evitar las aglomeraciones y lavarse las manos. Exija que se respete el aforo y si realiza una celebración en casa, que no sean más de 5 o 6 personas. Estas medidas tan simples de autocuidado emocional y sanitarias son de nuestra responsabilidad y al hacerlas una costumbre, pueden salvar vidas.
"Afecta el sistema inmunológico (...) para enfrentar enfermedades como el covid-19"
Dr. Jorge Font, MBA Diplomado en Adicciones U.C