El difícil momento del turismo
Durante las primeras 48 horas tras terminada la cuarentena en las comunas de Iquique y Alto Hospicio, se solicitaron más de 770 permisos de vacaciones para salir de Tarapacá. No obstante, para el ingreso de veraneantes a la región, solo hubo 36 solicitudes, lo que da cuenta de las complejidades que enfrentan y seguirán enfrentando las industrias relacionadas al turismo, entre las que se incluye a hoteles, restaurantes y un sinnúmero de comercios, incluidos los instalados en la zona franca.
Pese a que el avance a fase 2 del plan "Paso a paso" fue una importante medida para reactivar en parte la alicaída economía regional, lo cierto es que costará mucho revertir las pérdidas económicas que ya se arrastraban desde 2020 durante la primera parte del confinamiento, que en el caso de la zona se extendió por varios meses.
Incluso desde el gremio turístico han sido cautos, explicando que el sorpresivo avance hacia el desconfinamiento les impidió estar completamente preparados para la recepción masiva de turistas, sobre todo si se considera que esto llegó ya ingresando a la segunda quincena de febrero, donde buena parte de los visitantes ya se aprestan para iniciar las actividades propias de marzo.
En ese contexto, se visualiza como una buena alternativa el anuncio del gobierno de implementar, además de un refuerzo de la promoción de la zona, subsidios para el turismo y la industria creativa por $55 mil millones, de los cuales $50.000 millones serán destinados para el turismo y el resto para las empresas relacionado a la cultura y las artes.
El subsecretario de Turismo, José Luis Uriarte, dijo que esperan beneficiar a más de 20 mil empresas a nivel nacional, con subsidios no reembolsables, de transferencia directa y que el foco busca "financiar hasta un 70% de los planes de negocios de las empresas del turismo, tanto en capital de trabajo, como en activo fijo".
Con todo, es importante que el acceso a estos beneficios sea expedito y contribuya de manera eficiente a un sector económico que seguramente tardará bastante en recuperarse y del cual en la región dependen miles de empleos.
El país y Tarapacá siguen atravesando por una tremenda incertidumbre y no hay tiempo que perder.
"Costará mucho revertir las pérdidas económicas que ya se arrastraban desde 2020 durante la primera parte del confinamiento".