Condenaron a ex PDI por grabar desnuda a compañera detective
Los hechos se registraron en un departamento de Iquique donde se hospedaban los funcionarios por un operativo.
Como autor del delito que sanciona al que capte o grabe imágenes o hechos de carácter íntimo en un lugar privado o sin libre acceso público fue condenado el ex funcionario de la Policía de Investigaciones (PDI) Diego Morales López, a cumplir la pena de 61 días de presidio, esto luego que la Fiscalía acreditara en el juicio oral que el acusado grabó con su celular a otra funcionaria policial cuando se vestía al interior de un dormitorio, en un departamento de Iquique donde se hospedaron por cumplir con un procedimiento policial.
Tras la presentación de la prueba por parte de la Fiscalía se comprobó que en julio del año 2018, en horas de la mañana, el acusado grabó desde su teléfono celular a la víctima aproximadamente durante 24 minutos, sin contar con el consentimiento de aquella, logrando capturar imágenes de su cuerpo desnudo, en circunstancias que ella se estaba vistiendo en la habitación de un departamento ubicado en el sector sur de la comuna, en el que ambos durmieron junto a otros funcionarios de la PDI que mantenían en cumplimiento de labores investigativas.
Para lograr su cometido el acusado aprovechó que la afectada fue al baño a ducharse para ocultar su teléfono celular entre las prendas de vestir que mantenía en el suelo junto a la cama, direccionándola al lugar donde llegaría la afectada, logrando así grabarla desnuda.
En el juicio declaró la víctima, quien relató cómo se dio cuenta que el celular del imputado la estaba grabando, cuando le contó a los otros compañeros que estaban en el departamento y les mostró parte del video, antes de borrarlo, y cuando encaró al propio imputado, avisando luego lo ocurrido a su jefatura.
Además relató el daño emocional que esto le provocó, ya que eran un equipo de trabajo.
También declararon los otros funcionarios que estuvieron presentes en el departamento, el funcionario policial que estuvo a cargo del sumario y que terminó con la sanción de separación del imputado de la institución; y los peritos que realizaron una reconstitución de escena en el contexto del sumario, quienes confirmaron que el celular del imputado estaba en buenas condiciones y que para hacer funcionar la cámara de video se necesitaban realizar a los menos dos pasos, siendo casi imposible que el equipo se accionara por error.
También se mostraron las imágenes que grabó la víctima ese mismo día de cómo estaba el celular grabando y declaró la psicóloga que evaluó el daño emocional que estos hechos provocaron en ella. Terminado el juicio, el tribunal resolvió condenar a 61 días de presidio al imputado Diego Morales López como autor del delito que sanciona al que capte o grabe imágenes o hechos de carácter íntimo en un lugar privado o sin libre acceso público.
24 minutos , duró la grabación que realizó el acusado de la afectada.