Comercio no esencial trata de sobrevivir tras nueva restricción
Algunos comenzaron a vender productos en sus casas.
Con preocupación se encuentran trabajando en sus casas o cambiando de rubro para ventas online, los comerciantes que a causa de la pandemia no pueden abrir sus negocios.
Para algunos, consultados por este diario, la situación se tornó más compleja a causa de que solo se priorizaron establecimientos que venden los 19 productos esenciales que definió el Plan Paso a Paso, que deja fuera, por ejemplo, a dueños de peluquerías, sastrerías o locales de venta de telas y ropa.
Es el caso de Marcela Alvarez, de la Feria Persa, que ante la imposibilidad de abrir en calle Zegers, su negocio de fabricación de timbres y estampados solo lo realiza online y a pedido.
"Esto es una situación complicada, económicamente estoy gastando los últimos ahorros. Aún tengo mercadería que no pude vender de la cuarentena pasada y de los timbres alcancé a abastecerme la semana pasada , antes de saber de las restricciones que son inesperadas", argumentó.
Para Alvarez, la situación está tan crítica que una apertura en mayo no garantiza nada, ni siquiera el poder pagar los arriendos, precisando al menos que en su caso ha existido comprensión. Por ahora su negocio sobrevive con ventas desde la casa o en redes sociales. Álvarez, quien fue presidenta gremial de la Feria Persa, aseveró que "sobrevivir siete meses sin atender es muy complicado".
Una opción que comerciantes de la Feria Vivar también adoptaron, puesto que algunos han optado por reconvertirse en redes sociales y obtener alguna ganancia.
Marianela Chalco, presidenta de la feria Vivar, aseveró que ya las restricciones y cuarentenas tienen al gremio del comercio en complejas condiciones. "Hay que trabajar y no tenemos bonos como el resto de la gente solo por el hecho de estar formalizados". Dijo que incluso es mejor optar a apoyos de privados para recibir ayudas.
Mientras que locatarios de calle Vivar que prefirieron resguardar sus nombres, señalaron que si las medidas siguen, lo más seguro es que en mayo no vuelvan a abrir o entreguen los locales, porque no pueden pagar los arriendos, los que en el caso de la tradicional arteria del comercio pueden llegar hasta a un millón de pesos.
Ayer no fue posible conocer la opinión del presidente de la Cámara de Comercio Detallista, Miguel Díaz.
Cierra tradicional restaurante
En calle Baquedano, Omar López se encontraba "rematando" loza y muebles del restaurante "Canto del Mar", que después de 25 años cerrará por el efecto de la crisis. "Ni siquiera alcanza para subsistir con el delivery. Me cansé y voy a entregar el local", aseveró. El empresario aseveró que la determinación la adoptó hace dos meses considerando que solo pudo atender 15 días en diciembre y para ello procedió a liquidar todo. "No soy propietario, pero otra persona llegará acá", aseveró.