OPINIÓN
Royalty Minero: discutamos con responsabilidad
Recientemente el parlamento aprobó el proyecto que establecería un nuevo royalty minero, el cual consideraría un impuesto adicional. Hoy, la minería es la principal actividad económica de nuestro país y tiene aún más importancia para las regiones del norte, donde constituye el principal aporte en el PIB desde Tarapacá hasta Coquimbo. La minería privada ha contribuido al Fisco de forma tan importante como la minería pública (Codelco y filiales), y con grandes niveles de inversión.
El proyecto en discusión proyecta una tasa del 3% sobre las ventas brutas, pero creciente según el precio del mineral. Por ejemplo, la tasa efectiva sería de un 21,5% con un precio de 4 dólares por libra, mientras que a un precio de 4,75 sería de un 30%. Todos estos valores son adicionales a los tributos ya existentes (44,4%), los que hoy están en el promedio internacional y similar a los cobrados en México, Perú o Australia. Con el impuesto adicional podría superar el 80%, lo que sería insostenible.
Hoy existe el Impuesto Específico de la Minería, donde la tasa depende del margen operacional, es decir, depende de la rentabilidad de la empresa. Sin embargo, este nuevo proyecto va en un sentido distinto, ya que estipula un rango uniforme de tasas, lo que podría afectar a las compañías con menos margen.
Digámoslo directamente, el aumento de la tasas, tal como se plantea en el proyecto, dejaría a nuestro país con la tasa más alta entre sus competidores internacionales, lo que conllevaría a una pérdida de interés para invertir en nuevos proyectos de explotación, como así también, la merma evidente en la competitividad internacional de nuestra industria. Esto podría afectar seriamente a regiones como Tarapacá, que verán seriamente afectadas sus economías, ya que el efecto multiplicador en el poder adquisitivo, en el empleo local y en la cadena de proveedores, se resentirían.
Ya vimos que la reforma tributaria de hace algunos años tuvo el efecto contrario respecto de la recaudación, por lo que en época de necesidad fiscal, es absolutamente necesario estudiar "responsablemente" - y por expertos - un mecanismo de recaudación tributaria que no afecte aspectos tan importantes como la continuidad de la actividad, su competitividad y proyección. La verdadera discusión debe ir orientada a una mayor contribución a las regiones donde se desarrolla la actividad, y no al erario central.
"Ya vimos que la reforma tributaria de hace algunos años tuvo el efecto contrario respecto de la recaudación".
Leopoldo Bailac, Presidente Asociación de Industriales de Iquique A.G.