Economía en pandemia
En el último informe de empleo del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), la tasa de desocupación se situó en 9,7%, creciendo 2,3 puntos porcentuales en doce meses. Por su parte, los desocupados aumentaron en 36,4% respecto a igual periodo del año anterior.
Lo anterior da un panorama crítico en el periodo analizado, el trimestre febrero - abril, donde gran parte la Región de Tarapacá estuvo en cuarentena y muestra lo nocivo que son para la economía las restricciones de la fase 1.
La cifra se ubica solo 0,3 pp. por debajo de los dos dígitos, cifra a la cual ya se llegó a nivel nacional, donde la tasa de desempleo se ubicó en 10,2%, también influido por las cuarentenas en distintas zonas del país en la llamada "segunda ola".
A esto se suman los informales, una preocupación en pandemia, pues en Tarapacá la tasa de ocupación informal se sitúo en 25,8%, anotando un descenso de 4,6 pp. en doce meses, como consecuencia de la caída en los ocupados informales (-14,4%), mayor al ascenso del total de ocupados (1,0%). A su vez, a nivel nacional, la tasa de ocupación informal se situó en 26,2%, disminuyendo 0,1 pp. en doce meses.
Si bien en el próximo informe se espera que exista una disminución del desempleo, luego que durante mayo se volvió a recuperar gracias a la vuelta a fase 2, si esta situación no se mantiene se volverá a tener cifras más críticas.
El futuro de la economía regional depende mucho de cómo se asume una responsabilidad personal respecto a las medidas de prevención sanitarias, como el distanciamiento, confinamiento voluntario, lavado de manos y todo lo que ayude a no aumentar los contagios. Aquello, además de concurrir a vacunarse en la fecha indicada, permitirá que, independiente que sigan existiendo casos, las redes asistenciales no se colapsen.
Todos deben aportar a reducir los contagios, pues cada vez que la región entre en situación crítica, no solo hay efectos en la salud de las personas, sino también en la economía doméstica, con mayor riesgo de caer en desempleo y con hogares que van cayendo en la línea de la pobreza.
"El futuro de la economía regional depende mucho de cómo se asume una responsabilidad personal respecto a las medidas de prevención".