Delitos que ponen en riesgo a la región
Hace exactamente un mes, la Oficina Nacional de Emergencias del Ministerio del Interior denunció el robo de equipos del sistema de alerta de tsunamis en Tarapacá, una situación compleja, toda vez que se trata de herramientas fundamentales que permiten hacer frente a una emergencia de proporciones, situación a la que Iquique y sus habitantes están constantemente expuestos.
De acuerdo a la información proporcionada por el organismo, el hecho ocurrió la noche del 23 de junio pasado, cuando desconocidos ingresaron al interior de las instalaciones ubicadas en el Cerro Esmeralda, desde donde fueron sustraídos paneles solares y cableados de conexión que permiten la activación de las sirenas de tsunamis desplegadas en el borde costero de la región.
Tras el delito, Onemi llamó a denunciar este tipo de actos y evitar que estas especies se comercialicen en el mercado informal, lo que podría desincentivar a quienes participan de estos actos vandálicos y que ponen en riesgo a toda la población. Asimismo, la dirección regional explicó que se interpuso una denuncia ante la justicia y que de forma inmediata se comenzaron las gestiones destinadas a reemplazar los equipos sustraídos.
Lamentablemente, esta semana se supo de un nuevo hecho delictual que afectó a otra de las instituciones dedicadas a combatir emergencias. En esta oportunidad el robo de cables de fibra óptica deshabilitó el teléfono 132 de Bomberos en Alto Hospicio, lo que sin duda pone en riesgo a miles de habitantes de una comuna con alta vulnerabilidad y donde un siniestro puede causar daños de proporciones, sobre todo si se considera que allí están emplazados decenas de campamentos y muchos de ellos ni siquiera cuentan con redes de agua potable que permitan combatir rápidamente un incendio.
Lo cierto es que hechos de esta naturaleza se están reiterando con bastante frecuencia e incluso han generado la interrupción de las transmisiones radiales de varias estaciones locales y nacionales.
Ante ese escenario, y pese a las complejidades territoriales que ello representa, es indispensable que la autoridad busque mecanismos que permitan resguardar de mejor manera este tipo de instalaciones, sin duda fundamentales para la seguridad de la población.
"Hechos de esta naturaleza se están reiterando con bastante frecuencia".