El décimo octavo fallecimiento del año a causa de la crisis migratoria tuvo lugar la noche de este martes a dos kilómetros del complejo fronterizo de Colchane.

Una ciudadano venezolano que cruzaba por un paso no habilitado junto a su esposa de la misma edad murió producto de complicaciones respiratorias generadas por enfermedades de base y de las secuelas del coronavirus.

Si bien el fallecimiento da cuenta de que el movimiento migratorio sigue por pasos no habilitados de la región, el deceso de Salvador Salom Barreda vuelve a mostrar la cruda realidad que vive actualmente Venezuela, la que hace que personas que debieran estar en etapa de jubilación se arriesguen, con todas las implicancias que esto significa, a cruzar una frontera a más de 3.700 metros sobre el nivel del mar.

Todos los días cientos de familias completas viajan por distintos países de Sudamérica buscando un mejor pasar, donde si bien muchas vienen a Chile, otras se quedan en Colombia, Ecuador o Perú, frente al rechazo de los habitantes de dichos territorios.

Situaciones como la que se vivió tras la marcha antimigración en Iquique, no es la única, y hechos de violencia se han dado en todo el continente, debido a que los estados no han sido capaces de ponerse de acuerdo para abordar de manera conjunta una problemática que no es culpa ni de los migrantes, ni de aquellos que deben acogerlos en sus ciudades, con la consiguiente ocupación de espacios públicos y verlos mendigar en calles debido a la imposibilidad de regularizar su situación para poder ejercer un trabajo.

En los últimos dos meses el Gobierno ha tratado de generar distintas instancias de apoyo para abordar la problemática humanitaria y también de las consecuencias en las poblaciones locales, sin embargo, se requiere una mayor celeridad en las acciones. Al mismo tiempo es necesario apuntar a medidas internacionales que permitan abordar como continente esta situación que se genera en un país, pero que sus consecuencias afectan a todos.

La migración no se solucionará desde lo particular y de eso hay mucha experiencia en el mundo, por ello es importante ser cautos ante promesas que no tienen sustento si no incluyen un trabajo internacional.

"La migración no se solucionará desde lo particular y de eso hay mucha experiencia en el mundo".

Para quienes hemos nacido, hemos sido criados o vivido mucho tiempo en Iquique, cuesta entender una ciudad fragmentada porque tenemos el concepto de barrio, de espacio público, de vernos formando parte de una gran familia que se comunica e interactúa, a través de carnavales, carros de viejos pascueros, pichangas en la calle o en la playa, encuentros en el Parque Balmaceda, Plaza Prat, fiestas en la Protectora o en el Círculo Italiano, e incluso, aunque parezca extraño, en la multitudinaria presencia en los funerales.

Formamos así parte de un mismo colectivo, donde el hecho de no sentirnos considerados a nivel central nos hizo fuertes, protectores de nuestra identidad y símbolos. En ese contexto, en 1968 se crea la sede de la Universidad de Chile en Iquique, respondiendo a la demanda que existía por parte de la comunidad, de que los hijos e hijas de la Tierra de Campeones siguieran los estudios superiores en su ciudad.

No obstante, la sede tras 13 años de exitosa vida y en plena dictadura, se transforma en Instituto Profesional de Iquique (IPI), sintiendo el retorno de los fantasmas de las banderas negras, pues implicaba que distintas generaciones deberían emigran para estudiar.

Pero el estudiantado, así como la comunidad, creían que era posible volver a ser universidad, así tras una ardua lucha de los centros de estudiantes, su Federación y la comunidad, a mediados de 1984 se reunieron con el Ministerio de Educación, que se comprometió a crear una universidad. Acuerdo que, a finales de ese mismo año se concretó, y dio vida a la Universidad Arturo Prat.

Así la historia nos demuestra que en los 55 años como sede de la Casa de Bello o bien en los 37 años como Unap, hemos sido una Institución del Estado y regional requerida por su comunidad y caracterizada, por la vinculación con nuestro territorio, sus actores, líderes y problemáticas.

Nuestro sello ha sido ser generadores de conocimiento, con una masa crítica estudiantil que al salir de su Alma Mater, ha fortalecido aún más nuestra vinculación con el territorio y sus comunidades.

Es el momento de recordar la historia y agradecer a quienes hicieron posible que nuestra región contara con educación superior para sus jóvenes y adultos. Feliz aniversario Unap.

"Es el momento de recordar la historia y agradecer a quienes hicieron posible que nuestra región contara con educación superior".

Alberto Martínez,, rector Universidad Arturo Prat

Pese a que la idea era que los colegios municipales nivelaran hacia arriba con un nuevo sistema de admisión escolar, lamentablemente muy pocas familias buscan quedar en estos y siempre apuntan a los subvencionados.

El pato de hule

Aunque muy pocos en Chile tuvieron el famoso pato de hule para darse un baño en la infancia, lo cierto es que la intervención es ampliamente apreciada por las personas. Ya se vio con la muñeca gigante y otras obras de este tipo que se exponen en las ciudades.

Armas de fuego

Es necesario que la autoridad se ocupe del alto número de personas heridas con armas de fuego en la región. Es indispensable abordar el tema de manera profunda, ya que la solución nunca será tapar el sol con un dedo y sin mirar la compleja realidad que nos afecta.