La obra de la Teletón
Anoche comenzó la transmisión de una nueva jornada de la Teletón, cruzada solidaria que partió en el año 1978 con el objetivo de reunir fondos para financiar la rehabilitación de los niños y jóvenes que presentan alguna discapacidad física.
La historia indica que ese año, el animador Mario Kreutzberger (Don Francisco) propuso a la Sociedad de Rehabilitación del Niño Lisiado realizar un programa televisivo de 27 horas continuas para reunir dineros que contribuyeran a la labor del organismo, iniciativa a la que se sumaron empresas privadas y particulares. De esa manera, a lo largo del tiempo se logró la habilitación e implementación de 14 centros médicos desde Arica a Coyhaique.
Según los resultados del Segundo Estudio Nacional de la Discapacidad realizado por El Ministerio de Desarrollo Social y Senadis, que fue difundido en 2016, más de 229 mil niñas, niños y adolescentes del país viven en situación de discapacidad, es decir, el 5,8% de la población de 2 a 17 años.
La cifra es todavía más impactante si se considera que el porcentaje aumenta a 16,7% al incluir a la población adulta, completando más de 2,8 millones de personas.
En ese contexto, la Teletón ha permitido la atención de miles de chilenos que, de no mediar el apoyo de la fundación, no tendrían los recursos necesarios para cubrir los altísimos costos de sus terapias, las que además de profesionales altamente calificados, demanda el uso de tecnología de punta, intervenciones quirúrgicas y apoyo emocional, entre muchos otros factores que contribuyen a la rehabilitación.
Por eso, más allá de algunas opiniones disidentes con la cruzada, lo cierto es que la Teletón es una obra que ha significado un importante aporte a miles de familias, permitiendo que se integren con mayores posibilidades a la sociedad. No obstante, el concepto de rehabilitación y de inclusión no pude quedar radicado en las denominadas "27 horas de amor", sino que debe materializarse en la cotidianidad, donde muchos todavía parecen desconocer que una ciudad inclusiva se construye también con pequeños detalles.
Además de aportar en el banco, es clave respetar la infraestructura destinada a las personas con movilidad reducida y no bloquear las vías peatonales con un vehículo, por ejemplo.
"Lo cierto es que la Teletón es una obra que ha significado un importante aporte a miles de familias".