La ruta de la información
Un 22 de enero de 1973, se presentaron oficialmente los primeros equipos comerciales que usarían una tecnología que estaba redefiniendo el uso de la información para siempre: el Floppy Disk o más conocido como "disquete".
Su sistema de almacenamiento usaba un disco de material magnético, recubierto en un plástico flexible. En sus primeras versiones se encontraba en un compacto tamaño de 8'', alcanzando una imponente capacidad de hasta 512 kB. Con los años su tamaño se fue reduciendo y su capacidad aumentando exponencialmente.
Hoy en día los disquetes prácticamente no son utilizados, al ser reemplazados por mecanismos mucho más eficientes y duraderos; sin embargo, fue parte fundamental del desarrollo tecnológico por casi 30 años, dejando una marca tal que sigue siendo reconocido como el símbolo universal de "guardar" en todas las plataformas utilizadas, incluso por las nuevas generaciones.
La información siempre ha sido valiosa en distintos ámbitos, asociado al poder político e incluso al mismo nivel (o superior) que el dinero. Claramente, la información no tiene el mismo valor para todos y se puede clasificar en distintos tipos, como la información científica, militar, económica e incluso personal. Dependiendo del tipo de información que manejemos, esta debería compartirse, limitarse o respaldarse. Lamentablemente, al crecer la tecnología, la ruta de la información se diversifica cada vez más y con eso se reduce nuestro control sobre ella. Peligros como la replicación descontrolada o la alteración de información son un peligro real hoy en día, el cual no se le ha dado el peso que corresponde.
En particular, el escaso resguardo de la información personal y la creación de información falsa son algo que seguramente todos hemos experimentado, pero que muchos no han tomado conciencia de ello. Claros ejemplos de esto son las empresas de distintos servicios que comparten información de sus clientes o las noticias falsas y alarmistas de teorías conspiranoicas, más aún en época de pandemia. Creo que es necesaria una legislación sobre el uso (no control) de la información, acorde al desarrollo de las tecnologías, en especial ahora que estamos en proceso de creación de una constitución. No debemos dejar que situaciones como éstas empañen el desarrollo de tecnologías como el disquete y el potencial de la Ruta de la Información para el bienestar de la humanidad.
"El escaso resguardo de la información personal y la creación de información falsa son algo que seguramente todos hemos experimentado".
Pablo E. González Villarroel, Astrofísico, Universidad de Tarapacá. Explora Tarapacá.