Tarapacá también es Chile
Mantener el orden público, tomar las medidas necesarias para que exista seguridad en las ciudades, disminuir los delitos, mantener la paz social y tranquilidad de las personas, perseguir y castigar a los delincuentes, restablecer el imperio del derecho cuando es violentado, son algunas de las principales obligaciones del Estado, sea del poder Ejecutivo o el Poder Judicial.
En Tarapacá nada de esto se está cumpliendo, el Estado ha fracasado en materia de seguridad, delincuencia y migración clandestina, nuestra frontera norte está tomada por el crimen organizado y eso ha permitido que entren sin control miles de personas, sin que sepamos quienes son.
Por Colchane entran diariamente alrededor de 500 personas, de las cuales solo un 25% van al albergue establecido en dicha comuna y el 75% restante no lo hace, se desplazan a vista y paciencia de todas las autoridades, policías y militares. Ingresando también lo que quieran, drogas, armas, niños que pueden no ser los suyos, es decir, puede haber también trata de personas y, por cierto, tráfico de migrantes, pero todos miran para el lado. Una gran cantidad de esas personas terminan en la ciudad de Iquique y Alto Hospicio, algunas en tomas ya existentes y la mayoría en los espacios públicos.
Esto ha generado mal vivir, problemas de salubridad pública, inseguridad, delincuencia y reiterados delitos violentos hacia los civiles, pero también hacia las policías como apreciamos recientemente en el ataque a carabineros que procedían a hacer un control por droga, que terminó con uno de ellos herido con una fractura de nariz.
También vemos como el promedio de homicidios en Tarapacá subió enormemente el año 2021 llegando a 52 muertes, cuando habitualmente estos delitos eran 8 o 10 al año. El año 2022, partimos con homicidios y un secuestro que terminó en muerte. No son hechos aislados y no son delincuentes menores, lo que se ha instalado en nuestra región es el crimen organizado, particularmente una banda territorial venezolana llamada el Tren de Aragua entre otras. Desde que esto comenzó lo advertimos y pedimos a todas las autoridades que tomaran las medidas para detener el ingreso clandestino para restablecer el orden público, sin ser oídos o sin que las medidas adoptadas produjeran el efecto buscado. Por ello, desde que se decretó Estado de Excepción de emergencia en la Araucanía, estamos pidiendo lo mismo para Tarapacá, esta medida extrema es precisamente para situaciones extremas como la grave alteración del orden público que se vive día a día en esta región, pero una vez más no fuimos escuchados, a pesar de decirles que Tarapacá también es Chile. Espero que no se den cuenta cuando ya sea tarde y sean los propios habitantes de esta región quienes salgan a hacerse justicia.
"Por Colchane entran diariamente alrededor de 500 personas".
Luz Ebensperger,, senadora