El complejo problema de la delincuencia
Quince homicidios y un sinnúmero de hechos delictuales de inquietante violencia se han registrado en la región durante los primeros cinco meses del año, lo que sin duda tendrá impacto en las futuras encuestas de victimización y de seguridad ciudadana, instrumentos que hace más de una década vienen marcado números rojos en la región.
No cabe duda que este escenario ha ido incubando una seria sensación de desprotección en los vecinos, quienes incluso han solicitado en las páginas de este Diario una real intervención de las autoridades en los barrios, sobre todo en aquellos que parecen más vulnerables ante la delincuencia. Así lo han expresado habitantes de sectores tan emblemáticos como el centro y el casco histórico, y también quienes residen, por ejemplo, en la zona de Huayquique, casi en el extremo sur de la capital regional.
Lamentablemente y sin miedo a exagerar, pareciera que el temor a sufrir la acción de la delincuencia se ha ido extendiendo a cada uno de los rincones de Iquique y Alto Hospicio.
No cabe duda que la situación es compleja y así ya lo manifestó en más de una ocasión el mismo fiscal regional, autoridad que por las labores propias de su cargo cuenta con una opinión que debe ser escuchada, pero no solo como un antecedente, sino que más bien como un llamado para que la autoridad política tome cartas en el asunto y despliegue medidas que permitan hacer frente de forma efectiva al problema y no solo desde una perspectiva comunicacional.
Es claro que la dotación policial y las herramientas (técnicas y humanas) de los organismos vinculados con la seguridad pública no son las óptimas y que los esfuerzos realizados por las distintas administraciones no han sido suficientes. Sin embargo, eso no debe ser sinónimo de conformidad o inacción.
Con todo, parece importante el llamado del Presidente Boric para generar un amplio acuerdo para combatir la violencia y devolver a los vecinos la tranquilidad que tanto se extraña. Es hora que todos los sectores se sumen ante un fenómeno que está menoscabando la calidad de vida de la población.
"No cabe duda que la situación es compleja y así ya lo manifestó en más de una ocasión el mismo fiscal regional".