Natividad Espinoza R.

Dejar de fumar no es una decisión sencilla y todavía más difícil es mantenerse firme los primeros días sin nicotina. Afortunadamente, quienes están dejando este dañino vicio pueden apoyarse en sus cercanos en miras a un abandono exitoso del cigarro. Pero, ¿cómo ayudar a alguien que está dejando de fumar?

El doctor en Psicología y académico de la Universidad Central (UCEN), Gonzalo Soto, explicó que "dejar de fumar es un proceso decisional que requiere que la persona tenga una serie de condiciones que le permitan mantener el esfuerzo y dejar la adicción a la nicotina; en este sentido es importante entender que la persona en su proceso de independencia puede presentar alteraciones en el ánimo (tendencia a la irritabilidad) e incrementar conductas ansiosas (comer o hablar más)".

En este sentido, el experto sostuvo que "es importante entender estos cambios para facilitar el cambio de hábito de quien está dejando de fumar. Si alguien del entorno fuma, se propone que éste lo haga en otro lugar mientras la persona logra ir controlando la activación del deseo de fumar por asociación".

Evite comentarios

Los cercanos a quien está dejando el cigarro también "deben comprender que este acto es una necesidad de libertad de quien está dejando de fumar", dijo Soto. Por eso, comentarios del tipo "estás comiendo de más" o "se nota que no estás fumando porque andas de pésimo humor", aunque sean en tono de broma, son contraproducentes ya que, manifestó, "la conducta actual aparece criticada y la anterior que era fumar aparece nuevamente cómo deseable".

Asimismo, aseguró el psicólogo, para disuadir a alguien de tener una recaída, lo ideal es "recordarle los días que lleva sin fumar, hacerle ver qué aspectos evalúa que han mejorado en estos días, invitarle a disfrutar pero sin el cigarrillo, no hablar mucho sobre el tema, y por sobre todo motivarle a que mantenga el esfuerzo, aun cuando sienta que está a punto de caer".

Hoy es el Día Mundial sin Tabaco, ideal para empezar.