Cámaras de televigilancia
Tras sostener una reunión con vecinos y Carabineros, el diputado Renzo Trisotti manifestó el jueves su preocupación por la presunta inoperatividad de 48 cámaras de televigilancia emplazadas en distintos sectores de Iquique. El parlamentario explicó que la información emanó desde la policía uniformada y solicitó la rápida intervención del municipio para solucionar el problema, argumentando el alto nivel de inseguridad que han manifestado los tarapaqueños.
En respuesta, la Municipalidad de Iquique precisó que efectivamente existen dispositivos que no están funcionando y que permanecen en proceso de mantención, no obstante, comentaron que no es el número que acusa Trisotti.
Sin embargo, más allá de la cifra, lo cierto es que el actual escenario que enfrentan los vecinos, donde parece haber recrudecido la victimización y el temor, demanda la máxima atención de las autoridades y de los organismos vinculados con la seguridad pública, por lo que se hace necesario contar con todos los recursos humanos y técnicos para combatir la delincuencia.
Todas las encuestas, además de la conversación ciudadana, dan cuenta que la inseguridad es la mayor preocupación que hoy por hoy enfrenta el país, anteponiéndose incluso al complejo e incierto panorama económico y sanitario por el que se ha atravesado en los dos últimos dos años. Tarapacá no está ajena a esta realidad y las cifras de homicidios y otros delitos violentos bien dan cuenta de ello.
Se trata, entonces, de un tema que no resiste más esperas, por lo que las instituciones públicas -ya sean políticas o técnicas- deben revisar cada detalle de las medidas de prevención y, junto con adoptar nuevas iniciativas, agilizar el funcionamiento de las herramientas existentes.
El fenómeno delictual que golpea a la región no es una cuestión menor, pues además de generar una constante sensación de inseguridad en la población, impacta distintas áreas del quehacer social como el comercio, el turismo y la economía en general.
Con todo, es evidente que es hora de actuar y ajustar todos los nudos sueltos.
"El actual escenario que enfrentan los vecinos, donde parece haber recrudecido la victimización y el temor, demanda la máxima atención de las autoridades".