Delitos violentos: una realidad
La mayoría de las veces se habla de un aumento en la sensación de inseguridad, pero cuando se va a las cifras puras, como las que arrojan los informes estadísticos de Carabineros, es claro que se trata de un aumento real de la violencia.
En base al análisis a través del Sistema Táctico de Operación Policial (Stop) los delitos violentos han crecido en un 105% en la región. Es decir, ya van 1.643 delitos en 2022, más del doble de los 801 ilícitos de esta naturaleza registrados a la misma fecha el año pasado.
El desglose da cuenta que en 2021 hubo 39 armas de fuego incautadas por Carabineros y a la fecha la cifra asciende a 98 unidades. También la cantidad de bandas desarticuladas ha subido, registrándose el año pasado 41 y a la fecha actual 51, es decir 10 más. Además, este año se han recuperado a la fecha 572 vehículos robados, mientras que en el mismo periodo del año pasado iban 151.
Pero independiente de las cifras, el análisis no solo muestra un crecimiento de los ilícitos, sino también un fortalecimiento de la labor policial, pues desde el verano, tanto por el anterior como el actual gobierno se han realizado planes de acción para reducir los delitos, con mayor número de policías, principalmente en las comunas de Iquique, Alto Hospicio y Colchane.
De todos modos, las estadísticas actuales reflejan, entre otras cosas, que los planes de acción deben ir más allá de un momento de tensión determinado y apuntar a las medidas necesarias para que sean permanentes.
Por un lado está el aumento de los contingentes policiales, pero también se necesitan más funcionarios de Aduanas, del Ministerio Público, Poder Judicial, Defensoría y, en general, de todo aquello que contribuya a un mejor control de los delitos en la región.
También se deben generar acciones relacionadas con la prevención, como son la mejora de los espacios públicos, la iluminación, además del acceso a talleres deportivos y culturales que busquen fortalecer la formación ciudadana de los más jóvenes.
La realidad que se vive en torno a la delincuencia en Tarapacá será difícil de cambiar si no se aborda multidimensionalmente y con acciones a corto, mediano y largo plazo.
"Las estadísticas actuales reflejan, entre otras cosas, que los planes de acción deben ir más allá".