54 años de la ley que impulsó a las juntas de vecinos y organizaciones comunitarias
El 7 de agosto quedó como la fecha para destacar la labor de los y las dirigentes sociales que impulsan proyectos para mejorar sus territorios y comunidades.
Los dirigentes sociales comparten una vocación y compromiso con sus comunidades, a veces poco reconocida. Así, hombres y mujeres en forma anónima ejercen un liderazgo de servidores públicos para el desarrollo de organizaciones sociales o territorios
Por ello cada 7 de agosto es conmemorado el Día Nacional del Dirigente Social y Comunitario para destacar la labor de quienes buscan mejores expectativas para la comunidad, sobre todo en la Región de Tarapacá, que presenta características únicas por su gente y organizaciones comunitarias.
La fecha escogida no podía ser más propicia, ya que un 7 de agosto, pero de 1968 -durante el mandato del Presidente Eduardo Frei Montalva y en el marco de su política de promoción popular- fue promulgada la Ley N°16.880 sobre juntas de vecinos y demás organizaciones comunitarias, que significó un potente estímulo al desarrollo del tejido asociativo en el mundo popular.
Durante la década de los '60 crece con fuerza el objetivo político de la institucionalización de las organizaciones de base y por tanto, la exploración de formas de articulación con el Estado.
El debate llegó al Parlamento, donde tramitan iniciativas como una moción del senador Radomiro Tomic (ya en enero de 1963), que planteaba el reconocimiento legal de las juntas de vecinos, hasta entonces entidades de hecho.
Unidad vecinal
Después, un proyecto del gobierno de Frei Montalva enriquece la iniciativa, pasando de 18 artículos a un total de 64, entregando a las juntas de vecinos facultades de representación en el territorio llamado 'unidad vecinal', pudiendo organizarse hasta el nivel nacional.
El consenso de las distintas fuerzas políticas de la época quedó sellado en la promulgación de la ley un 7 de agosto de 1968. Mientras, el movimiento poblacional ya no solo se encaminó hacia la vivienda: ahora también su preocupación estuvo en el desarrollo comunitario, el empleo, el deporte y la cultura popular.
Desde el Ministerio de Desarrollo Social destacan que "el trabajo de las y los dirigentes vecinales, sociales y comunitarios constituye un aporte esencial al fortalecimiento de nuestra democracia, al generar, en la base, la necesaria articulación asociativa, indispensable para la generación de vínculos y soluciones comunitarias a los problemas de la ciudadanía".
También destacan que "los últimos años no han sido fáciles, y por lo mismo los dirigentes han debido trabajar con mayor esfuerzo para ir en beneficio de sus comunidades".
Entre las dirigentes sociales destacadas en Tarapacá están Regina Veras Farías por su trayectoria como dirigenta social de la Junta de Vecinos Granadero n°46; Angélica Tito Cortés por su labor en las agrupaciones de mujeres emprendedoras de la comuna de Huara; y Rosa González Rivera por su perseverancia en la Junta de Vecinos Sol Naciente de la comuna de Alto Hospicio.