Un puerto climáticamente inteligente
Nos encontramos frente a una crisis climática sin precedentes. El cambio climático es un problema que avanza de forma acelerada y nos afecta a todos y en esto, los puertos no son una excepción. Una de las principales consecuencias de este fenómeno, son las marejadas. Esto implica el sometimiento de la infraestructura portuaria a condiciones cada vez más adversas, así como también cierres de puerto. Esto último, en palabras simples, se traduce en dejar de atender naves.
Si bien nuestro puerto no sufre como otros el cierre de operaciones por marejadas, ya que cuenta con el privilegio de contar con aguas abrigadas - tranquilas para la navegación y atraque - ocuparnos del cambio climático es urgente e imprescindible. De acuerdo al informe de mayo de este año de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo, los puertos estarán expuestos a un riesgo cada vez mayor de sufrir inundaciones costeras en 2030.
Este escenario pone urgencia a la evaluación de riesgos climáticos y por supuesto, a impulsar una planificación a largo plazo, centrada en la resiliencia. Desde las proyecciones de cambios en la marea que pueden significar inversiones en la infraestructura, hasta que el transporte marítimo reduzca sus emisiones de carbono. Toda industria debe revisar su impacto y en eso hemos estado trabajando, en el marco del Consorcio Logístico-Comercial de Tarapacá, en el que desarrollamos un Acuerdo de Producción Limpia, así como iniciativas para la gestión y control de residuos, eficiencia energética y elaborar una hoja de ruta, junto a nuestro concesionario, para el desarrollo de iniciativas de economía circular.
En síntesis, nos asiste el imperativo de trabajar junto a todos los actores de la cadena logística y la comunidad, en acciones que mitiguen los impactos negativos en el medio ambiente, así como construir un sistema logístico-portuario, climáticamente inteligente, que nos permita dar continuidad operacional a nuestras actividades.
"Nos asiste el imperativo de trabajar junto a todos los actores de la cadena logística y la comunidad, en acciones que mitiguen los impactos negativos en el medio ambiente, así como construir un sistema logístico-portuario".
Magdalena Balcells,, presidenta de Puerto Iquique