Consumo de alcohol en universitarios
El último estudio del Servicio para la Prevención del Consumo de Alcohol y Drogas, Senda, revela la preocupante realidad del consumo en los estudiantes universitarios.
La muestra da cuenta que el consumo del alcohol es el de mayor prevalencia en los estudiantes universitarios del país, en un estudio que por primera vez incluyó a planteles de la Región de Tarapacá.
Los resultados establecieron que 48,8% de los encuestados afirma que consumió alcohol durante el último mes, pero más grave aún es que de quienes bebieron, el 63% reconoce haberse embriagado al menos una vez (haber tomado más de 5 tragos en caso de los hombres y 4 en caso de las mujeres).
Se trata de resultados complejos, no solo por los efectos en la salud, sino también en las consecuencias que puede tener la embriaguez en otras conductas, como la baja percepción de riesgo y que lleva a conductas peligrosas.
Muchos accidentes de todo tipo tienen su origen en el consumo de alcohol, que incluso en el caso de la conducción de vehículos motorizados el resultado podría llegar a ser fatal.
Mucho más abajo en la prevalencia aparecen otras drogas, donde la marihuana es la más consumida, no obstante, el 21,1% de los jóvenes dicen haber consumido esta sustancia.
Al mismo tiempo, el informe muestra la baja percepción de riesgo respecto a los efectos del alcohol y solo 18,9% cree que es riesgoso tomar tres o más tragos por ocasión y el 44,3% cree que es riesgoso fumar marihuana frecuentemente.
La percepción de riesgo de alcohol es bastante baja y se suma al alto porcentaje de los bebedores jóvenes que afirman que se embriagó al menos una vez el último mes, lo que da cuenta que se trata de un tema que debe preocupar no solo a las familias, sino también a los planteles de educación superior, incrementando las actividades que fomenten una vida saludable.
Sin duda, es importante que se siga trabajando en fortalecer una cultura preventiva en los jóvenes, que permita que a futuro estos índices vayan en descenso, sobre todo en el alcohol, que al ser una droga legalizada genera un mayor impacto en la salud de los chilenos, al estar normalizado su consumo.
"El 63% reconoce haberse embriagado al menos una vez el último mes (haber tomado más de 5 tragos en caso de los hombres y 4 en caso de las mujeres)".