Déficit habitacional
La escasez de viviendas y las dificultades para acceder a una son una preocupación constante en el país y en la región, problema que tras la pandemia se ha intensificado en prácticamente todo el territorio nacional.
En su primera cuenta pública, el Presidente Gabriel Boric manifestó que en Chile se registra un déficit de 650 mil viviendas, es decir, se trata de un problema de compleja solución y que, pese a los avances que han realizado las distintas administraciones públicas, está muy lejos de resolverse.
Según estudios realizados por "Déficit Cero", iniciativa impulsada por TECHO-Chile y otras instituciones públicas y privadas, la situación actual se asocia a múltiples factores, entre ellos "la creciente preferencia de las familias por residir en ubicaciones centrales; al encarecimiento de la compra de viviendas por la menor disponibilidad de suelo urbanizado en áreas metropolitanas y alza en las tasas de créditos hipotecarios; además de cambios demográficos que multiplican la tasa de jefatura de hogares, como el envejecimiento poblacional, conformación de hogares más pequeños y la migración".
En el caso particular de Tarapacá, el organismo indica que el requerimiento total de viviendas es de 29.652. De ese total, más de 8 mil corresponden a familias que actualmente viven en campamentos, por lo que es posible que esa cifra siga en aumento.
En medio de este escenario, nuevamente aparece como alternativa la posibilidad de crear proyectos habitacionales al sur de Iquique, iniciativas que, por cierto, no son nuevas, pero que poco y nada han avanzado en la última década. Están, por ejemplo, los casos de Altos de Playa Blanca -el que se construyó en una primera etapa, pero que hasta hoy está lejos de ser una solución- y el de Lobito, que se ha quedado principalmente en estudios, por lo que aún no es una realidad.
Es evidente que el déficit habitacional no se resolverá en el corto plazo, sin embargo, es clave que los distintos organismos públicos se articulen para avanzar y que, además, se fortalezcan las iniciativas que aborden el tema desde una real política de Estado, que no esté sujeta a los cambios en la administración pública, los que muchas veces terminan por retrasar las soluciones.
"El requerimiento total de viviendas es de 29.652. De ese total, más de 8 mil corresponden a familias que viven en campamentos".