El obispo de Melipilla, Cristián Contreras Villarroel, en extensa entrevista se refirió a la crisis de seguridad y de confianza en la sociedad chilena, expresando: "La ciudadanía percibe que los gobiernos, cualquiera sea su color político, no son capaces de satisfacer lo básico para llevar una vida digna. El fenómeno delictual en Chile es más violento que hace una década. Se constatan delitos de alta connotación, inmigración ilegal descontrolada, la sensación de vivir en una ciudad violenta e injusta. Tenemos que preguntarnos si las instituciones están preparadas para enfrentar esto. No podemos pedir a las instituciones de ayer que se hagan cargo de la sociedad de hoy. Una gran parte de la sociedad se siente violentada por el entorno. Esto genera fractura en los niveles de confianza, y la confianza es necesaria parta vivir en sociedad. Lo más peligroso es que una vez que progresa la crisis de seguridad, surgen ideas de salidas falsas como los populismos, autoritarismos que prometen ofrecer la protección que el Estado no otorga. Un discurso nacionalista si es asumido por personas ignorantes puede ser muy peligroso al sembrar intransigencia". Dijo también "Hay desconfianza hacia nuestra Iglesia por los graves abusos de diversa índole. Me refiero a los abusos de poder, de conciencia y sexuales. Es un deber reconocer esta deplorable realidad".
Pero si prometían lo mismo
Algo no cuadraba, porque si usted leía o escuchaba la propaganda de los candidatos a consejeros constitucionales, más parecían que eran candidatos a diputado, senador, alcalde, gobernador, etcétera, que para redactar el texto de la Nueva Constitución, siendo lejos, lo más descuadrado, el que prometieran y prometieran, la misma cantinela, que escuchamos para cada elección de diputados, senadores.
¿O no tenían idea a lo que estaban postulando? ¿Nadie les dijo, lo que tenían que hacer, de ser elegidos consejeros o definitivamente? Sin querer queriendo aprovecharon la oportunidad de promocionarse para las próximas elecciones municipales y parlamentarias, si es que el 7 de mayo, no aparecen, ni en las cómicas.
Al que le calce el sombrero, que se lo ponga...
¿O es que nadie, fiscaliza la publicidad electoral? Porque ante tanta necesidad, tantos problemas que hoy están en boca de tantos chilenos, es muy raro, que a nadie no le haya sorprendido, que los candidatos a consejeros constitucionales, prometieran mágicas soluciones definitivas a los mismos, pero a los mismos problemas, que diputados, senadores, alcaldes no han podido resolver en los últimos 30 años, y que a todas luces, no hay que ser un experto en leyes, ni en constituciones, para darse cuenta que una Carta Magna no soluciona esos embrollos domésticos. Si lo único que faltó es que le prometieran destaparle el alcantarillado a la señora Juanita.
Definitivamente, nada que ver, pero lamentablemente es lo que hay y quienes deberían no permitirlo… bien gracias.
Un dicho muy chileno dice, no hay primera sin segunda, pero como se ven las cosas capaz que nos veamos en una tercera. No olvidar que la primera nos costó 68 mil millones de pesos.
Derico Cofré Catril
Luis Enrique Soler Milla