Todo está listo y dispuesto para el comienzo del Carnaval Iquique 2004, el cual ha sufrido una serie de modificaciones y nuevas reglas, con el fin que se convierta en un verdadero atractivo turístico. La temática de esta versión será el mar y los delfines.
Colchane y Huara son las comunas más afectadas por el invierno altiplánico, fenómeno climático que durante las últimas dos semanas ha dejado caer incesantes precipitaciones en el sector cordillerano de la Región de Tarapacá. Se han registrado cortes de caminos.
Los funerales de barrio tienen una estética que los hace únicos. Poseen un protocolo basado en fuentes orales, que se sigue al pie de la letra aunque tiene variaciones. Funerales inmensos como el de Guillermo Valenzuela, las Niñas de Alto Hospicio, de Cardoen o de los muertos de Pisagua, llenaban de dolor las calles de Iquique.
El deseo de todo habitante de esta ciudad es ser enterrado con banda de música, se entiende con bronces. Privilegio exclusivo de los campeones de Chile se ha ido generalizando. En las puertas de nuestros dos cementerios, el himno a Iquique, rompe la tarde y señala que quedan pocos metros para el nicho.
En los tiempos de funeraria con coches tirados con caballo, un albino rigurosamente de negro y con un sombrero de copa, le daba un aire solemne a la ceremonia. Se llamaba Mino Leguatt. Funerarias como la de Moisés González o la de Guerra, Nuñez y La Humanitaria, prestaban un servicio con ataúdes que según ellos, duraban toda la vida.
En el nicho vacío, lo esperaban los funcionarios del cementerio encargados de sellar el nicho, una vez que el muerto, con su terno de madera, estaba dentro. Listo para su trabajo, debían esperar los discursos de rigor. Muchas veces eternos. Un deudo despedía a su padre y al decir: "Aquí están tus dos hijos" desde la multitud se escucha: "Tres". El humor se lleva bien con la muerte. Los mejores chistes se escuchan en los velorios.
Pero el broche de oro, lo daba, en este caso, don Wenceslao Jara, practicante de profesión, el galeno de la plaza Arica, despedía al muerto. Mientras el maestro Mancilla, para evitar que se seque el cemento, le echaba agua. Jarita con su mejor dicción exclamaba: "Lo que la ciencia no pudo hacer…" y los adjetivos iban y venían. Las plañideras de antes, le dieron el paso a personajes como Jarita, que con frases clásicas y redondas, construía la mejor estampa del fallecido. Por cierto, eso lo sabemos, no hay muertos malos.
"El deseo de todo habitante de esta ciudad es ser enterrado con banda de música".
Bernardo Guerrero Jiménez,, sociólogo y académico Unap
La consabida tradición republicana de Chile tuvo una muestra más durante el funeral de Estado que recibió el expresidente Sebastián Piñera Echenique. Y fue mucho más allá de respetar los debidos ceremoniales, también hubo respeto a su memoria y altura de miras para destacar su cometido como un demócrata, estadista, artífice de grandes acuerdos y que gobernó al país en dos períodos (2010-2014 y 2018-2022).
Más allá de los protocolos establecidos y los ritos que incluye un funeral de Estado, lo cierto es que hubo uno serie de hitos que dieron cuenta de la real disposición de enaltecer el alma nacional y contribuir al fortalecimiento de la democracia. Prueba de ello fueron, por ejemplo, las primeras palabras emitidas por el Presidente Gabriel Boric tras confirmarse el deceso de su antecesor en La Moneda o el abrazo que representantes de distintos sectores políticos -incluso muy opuestos- entregaron a Cecilia Morel, viuda del exmandatario.
En sus honras fúnebres, salvo contadas excepciones en redes sociales, hubo mucha coincidencia en su rol de gobernante, en su aporte a la democracia y al crecimiento del país. En el mundo político se visualizó transversalidad y en las calles también, lo que fue recibido con gratitud por su familia.
Señales claras de un pueblo que entiende de civismo y reconoce a quienes trabajan, dedican su tiempo y conocimientos en beneficio del bien común.
Dentro del pesar que provocó su inesperada partida, bien vale resaltar el grado de unidad y respeto que hubo en sus exequias. Y, sin duda, ese legado que hoy saltó a la luz pública se debe rescatar y atesorar.
Lo anterior incluso provocó reacciones a nivel internacional, donde destacaron las muestras de una tradición republicana que sigue viva en el país, pese a haber enfrentado hace no mucho tiempo difíciles episodios durante el denominado "estallido social". Seguramente el extinto mandatario sería partidario de aprovechar este momento para fortalecer la unidad nacional, el diálogo y los acuerdos. Quizás esa sea la mejor manera de honrar su memoria. Chile necesita de todos para avanzar.
"Dentro del pesar que provocó su inesperada partida, bien vale resaltar el grado de unidad y respeto que hubo en sus exequias".
Ayer se habilitó la plaza Condell para que jóvenes que disfrutan del animé comercializaran productos. Si bien la iniciativa apoya a la juventud, es impresentable que los instalen en un sitio sucio y con mal olor.
Para algunas personas se transformó en una costumbre el consumo de marihuana en plena playa Cavancha. Es claro que está prohibido fumar, incluso, cigarrillos. Esta conducta molesta a muchos, sobre todo a quienes concurren al balneario con niños.
Hoy, en un mundo digital y donde los medios de pago electrónicos van avanzando cada vez más, sería interesante que los peajes de la región habilitaran al menos el pago con tarjetas bancarias. En ocasiones no se lleva efectivo o los cajeros de la ruta no funcionan.