Expansionismo: Hitler y Putin, casos Polonia y Ucrania
Europa, que fue sacudida con las terribles consecuencias de la violenta desintegración de Yugoslavia, en los Balcanes. Actualmente, se ve conmovida por la guerra de agresión de Rusia contra Ucrania, desatada por el sátrapa moscovita de Vladimir Putin, que después de caída de la península de Crimea en manos de las hordas rusas, sin mayor oposición de Estados Unidos y sus aliados europeos, miembros de la OTAN, creyó que podía intentar con relativa facilidad una aventura bélica en Ucrania si el Tío Sam y aliados demostraran debilidad como la que adoptaron Gran Bretaña y Francia frente al brutal expansionismo de Hitler, el dictador de la Alemania nazi, con la anexión de Austria, para formar la Gran Alemania, los Sudetes y posteriormente del resto de Checoslovaquia, sin disparar un tiro, pero bajo un pesado ambiente de turbulencias nazis y amenazas de invasión. Los anglofranceses creyeron comprar la Paz en el Viejo Continente, horrorizados con los recuerdos de la Primera Guerra Mundial. Pero el tirano de Berlín no se detuvo, pretendía la devolución de Dantzig, Polonia se opuso, el país del Vístula tenía su seguridad nacional garantizada por Londres y París. Finalmente, el 1 de septiembre de 1939, la Alemania nazi comenzó la invasión de Polonia, era la Segunda Guerra Mundial, 1939-1945. Putin ha desarrollado una política parecida, es el neo imperialismo nostálgico del zarista y soviético, con sus alcances geoestratégicos, en un mundo convulsionado con rivalidades en el Indo-Pacífico, con el coloso chino y los Estados Unidos y aliados regionales, mientras Norcorea despliega sus armas letales contra su vecina Surcorea y Japón. El secretario de Defensa estadounidense ha señalado que si no se detiene a Putin continuará con sus ambiciones en Ucrania, ya tomó Crimea, consolida los territorios separatistas pro rusos. Y los antiguos países antes de la Rusia zarista o soviética entraron o lo harán a la OTAN, caso aparte es Suecia. Ucrania sería motivo de una guerra mayor que la actual, que es muy destructiva y grandes pérdidas humanas.
Ucrania , el granero de la antigua Rusia imperial y soviética, tenía inquietudes separatistas, con una propia identidad, historia, tradiciones, que fracasaron después de la revolución bolchevique de 1917, la siguiente guerra civil, el triunfo del bando rojo dio paso a la Unión Soviética, después de la caída del oprobioso Muro de Berlín en 1989, se produjo la increíble disolución del imperio ruso-soviético. Ucrania pudo lograr su anhelada independencia, hoy lucha por defender su integridad territorial.
Cuando se desató la invasión rusa, se pensaba que Ucrania no podría resistir por mucho tiempo, dependiendo de la ayuda de los Estados Unidos y aliados en Europa, que al principio fue débil, cautelosa, la que se ha incrementada fuertemente, así la resistencia ucraniana lleva dos años , sin que se divise una tregua y menos de paz. Los costos para ambos bandos son enormes, los que se benefician son los fabricantes de armas.
El gobierno de Moscú trata a la guerra de agresión como operación especial, y que es una guerra civil entre rusos, entonces, los ucranianos formarían parte de la gran Rusia. Ya Bielorrusia, si bien aparece como independiente, está bajo un tutelaje del Kremlin, eso mismo ocurría con Ucrania, hasta que fue derrocado el gobierno filoruso. De esta manera, adoptó una actitud pro occidental, escapando de la órbita moscovita, manifestando interés para ingresar a la OTAN, para asegurar su seguridad e independencia. Hay también preocupación en las estratégicas Finlandia y las repúblicas bálticas dentro de la situación geopolítica del mar Báltico, donde Rusia tiene el famoso enclave de Kaliningrado, ex Koningsberg, añorado por Polonia.
La historia entrega lecciones, se puede hace cierta comparación entre la política expansionista de Hitler y de Putin, con los casos de Polonia y Ucrania, que han conducido a la guerra, una de carácter mundial, mientras la actual se circunscribe a un país de Europa oriental, hasta el momento, con muchas amenazas que el conflicto podría desbordar sus fronteras, no escuchándose voces por cese del fuego, por los menos, cuando las noticias bélicas ya no llaman mayor atención en la opinión mundial, ahora centrada en Gaza.
Asdrubal Pineda Retamal