Esta es una pregunta frecuente que se hacen muchas personas, ya sean científicos, filósofos o individuos comunes que buscan respuesta a lo bueno y a lo malo que sucede, y comienzan a contemplar las diversas teorías de la creación. Allí se llega al famoso dicho: ¿Quién fue primero? ¿el huevo o la gallina? Esto, refiriéndose a que, si existe Dios, ¿quién lo creó a Él? Seguramente, en algún momento de su vida usted también se lo ha preguntado o ha nacido alguna duda debido a una experiencia cercana que ha puesto en duda la existencia de un ser supremo.

Le pregunto, ¿Qué respuesta ha encontrado? Nos gustaría vivir en un mundo donde no existan las guerras, la maldad, la muerte, la tristeza, el egoísmo, entre tantas cosas que afligen la tierra. Esto lleva a pensar que, la existencia del mal, a primera vista, parece incompatible con la existencia de un Dios infinitamente bueno, y muchos, inclinan su perspectiva de acuerdo a lo que sucede, por ejemplo, Dios es bueno si pasan cosas buenas, Dios no existe si pasan cosas malas. Y la ciencia ha determinado en numerosos estudios e investigaciones la existencia de un Creador de todas las cosas, el mismo Aristóteles lo dijo: "Tiene que haber una causa inexorable de lo creado… y ese ser sería Dios"

Pero, hay otra realidad, que el origen de todas las cosas está en el corazón del hombre, recuerde, que se nos ha entregado libertad o lo que se conoce como el libre albedrío, y todo lo construimos en base a las decisiones que tomamos, decidimos por el bien o por el mal, hacer lo correcto o lo incorrecto. También, sabemos que toda acción, sea buena o mala, tiene una consecuencia, por tanto, todo lo que vemos que sucede en el mundo, todo el sufrimiento, es consecuencia de la altivez, el orgullo, el deseo de poder, la rebelión y claramente la ausencia de Dios en los corazones. Escrito está en Juan 16:33: "En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo" ¡Hay esperanza en Él!

Yo desconozco lo que has vivido, pero créame que podemos vencer la tristeza, la falta de amor y la desesperanza, para ello, necesitamos tener una perspectiva correcta, ¿cómo? Quitando el foco del problema y buscar la presencia de Dios en esos tiempos difíciles, ¡Él prometió estar en medio de las tribulaciones! ¡Confía! Tu Creador tiene planes de bien para tu vida, ¡Él si existe, solo debes creer!

"Créame que podemos vencer la tristeza, la falta de amor y la desesperanza, para ello, necesitamos tener una perspectiva correcta".

Pastor Félix Orquera, Ministerio Int., Jesús Es El Rey

En este día del libro, nos queremos conectar con la importancia de la lectura, visibilizando los desafíos que tenemos en el proceso del desarrollo de la lecto-escritura en los estudiantes y cómo esto, que es clave para sus vidas futuras, se puede trabajar de manera colectiva.

Recibimos los datos SIMCE 2023 en nuestra región con la alentadora noticia de que en Lectura de 4to básico recuperamos lo que habíamos perdido, volviendo a resultados muy similares al 2018 (último registro pre-pandémico), alcanzando los 265 puntos promedio en la prueba de Lectura de 4to básico. Sin embargo, sólo el 38% de estudiantes está en el nivel adecuado para su curso en esta área.

Esto nos lleva a pensar que nos falta mucho, que debemos mirar estos avances con precaución y nos invita a seguir trabajando para que todos puedan alcanzar un nivel de lectura y comprensión que les permita disfrutar de esta llave que abre las puertas del conocimiento.

La lectura es la base para comprender todo.

Trabajemos de forma colectiva para apoyar transversalmente el desarrollo de esta habilidad, tanto dentro del ambiente escolar como fuera de él.

Paulina Olguín,

directora Enseña Chile Zona Norte

Lamentablemente, el bullying forma parte del cotidiano en las aulas: más del 80% de los niños y niñas en edad escolar reconoce haber pasado por una experiencia de acoso de este tipo. Incluso, la Superintendencia de Educación, documentó el año pasado más de 4.500 denuncias, registrándose como una de las cifras más altas en una década. Estos números son preocupantes si consideramos que estas situaciones pueden tener un impacto importante y duradero en sus víctimas.

Y si bien son ellas las primeras quienes deben ser asistidas, también se hace necesario indagar en qué pasa con quienes protagonizan estas actitudes e implementar estrategias preventivas y de intervención.

Para esto, es necesario conocer las motivaciones y entender las razones de la conducta agresiva que pueda ejercer un niño o niña hacia sus pares. Es fundamental además, comprender su historia y dinámica familiar y otras circunstancias que puedan llevarlo a relacionarse de forma violenta.

En algunos casos, la violencia y los malos tratos en el entorno o la familia pueden influir en que se convierta en agresor, aprendiendo que con la rudeza puede lograr objetivos. También puede presentarse falta de habilidades para gestionar emociones, como frustración o estrés, y muchas veces la agresión se interpreta como una búsqueda de respeto y reconocimiento entre pares.

Para abordar al niño acosador y fomentar una mejor convivencia escolar, es crucial guiarlo hacia una alfabetización emocional y hacia nuevas formas de relacionarse. Algunos, con el tiempo, desarrollan habilidades sociales más positivas gracias a nuevas figuras significativas en sus vidas, como amigos, padres o redes de apoyo.

Por ello, es relevante que la violencia escolar sea también un tema que involucre a toda la comunidad, donde se cree una cultura en la que alumnos, profesores y apoderados enfrenten de forma sistémica el bullying.

No es un problema de fácil resolución, pero crear conciencia en el entorno e implementar estrategias de prevención y contención, es un paso hacia un enfrentamiento efectivo. No olvidemos que si bien estamos hablando de víctimas y victimarios, son todos niños y niñas, quienes merecen crecer en un entorno de respeto y sana convivencia escolar.

Carmen Gloria Baeza,

Dra. en Psicología,

directora de la Carrera de Psicología

Universidad Tecnológica Metropolitana