Día de la Tierra
Como ocurre cada 22 de abril, ayer en Chile se celebró el Día de la Tierra, una jornada que hace ya varios años apunta a generar conciencia sobre la preservación de nuestro planeta y el cuidado del medio ambiente, temas que durante décadas se han intentado instalar con mayor y menor resultado, pero que hoy por hoy parecen ir cobrando más vigencia, sobre todo cuando muchos de los efectos del denominado cambio climático ya están afectando a diversas poblaciones.
Los primeros antecedentes del Día de la Tierra se remontan a 1968, año en que el Servicio de Salud Pública de Estados Unidos impulsó junto al ambientalista Morton Hilbert un simposio de Ecología Humana, donde científicos relevaron las consecuencias del deterioro ambiental en la salud humana. Un par de años después, el 22 de abril de 1970, se realizó la primera manifestación liderada por el senador norteamericano Gaylord Nelson, oportunidad en la que participaron dos mil universidades, 10 mil escuelas y varias comunidades.
Actualmente a las actividades se adhieren organismos públicos y sobre todo establecimientos educacionales a lo largo y ancho del país, donde el objetivo primordial es incentivar a los estudiantes a colaborar activamente en los urgentes desafíos medioambientales que demanda el planeta.
En ese contexto, es clave no solo generar contenidos especiales para esta fecha, sino que promover el conocimiento del entorno y de la biodiversidad. En el caso particular de Tarapacá se evidencia mucho desconocimiento sobre el tema y, peor todavía, un alto porcentaje de sus habitantes carece de un conocimiento mínimo de su geografía, el que generalmente solo se limita a la teoría.
Ahí quizás está la causa de lo difícil que parece avanzar en esta materia, ya que lo desconocido suele ser escasamente valorado y querido.
Tarapacá posee una riquísima biodiversidad que cruza desde el mar hasta la cordillera. Es momento, entonces, de buscar estrategias que permitan a las nuevas generaciones vincularse más estrechamente con su región y partir desde ahí con el cuidado del planeta. No hay mucho tiempo para comenzar a cambiar la relaciones que hoy se tiene con la Tierra.
"Un alto porcentaje de sus habitantes carece de un conocimiento mínimo de su geografía, el que generalmente solo se limita a la teoría".