El Reporte sobre Economía y Desarrollo 2025 (RED), publicado recientemente por el Banco CAF, marca un antes y después en cómo deberíamos pensar y ejercer el poder territorial. Su título, "Soluciones Cercanas," resume muy bien el punto central: los gobiernos regionales y locales (municipales) son actores indispensables en la creación de un desarrollo más justo, sostenible y resiliente.

Tuve el honor de ser invitado por CAF a ser parte del panel de conversación durante el lanzamiento de este estudio, representando a Chile y reafirmando una convicción que ya habíamos adoptado en la región de Tarapacá y que es compartida por todos los gobiernos regionales: sin verdadera descentralización, no hay desarrollo equitativo.

Hoy, los gobiernos subnacionales en América Latina y el Caribe ejecutan alrededor del 20 por ciento del gasto público -una cifra que asciende a casi el 50 por ciento en los más descentralizados- y lo hacen con competencias limitadas, recursos limitados y normativas en constante cambio.

El informe RED 2025 también destaca un fenómeno de importancia crítica para nuestra región: la sobreurbanización y sus impactos sociales y ambientales. El estudio llama a la cautela ya que muchos países de América Latina han experimentado una rápida expansión urbana no planificada, sin infraestructura ni servicios suficientes. Sabemos esto de primera mano en Tarapacá.

Por eso la creación del Área Metropolitana Alto Hospicio-Iquique no sólo es pertinente, sino estratégica. Estamos avanzando en temas como el transporte público, el manejo de residuos, el acceso a servicios básicos y la planificación territorial, trabajando junto a los municipios para encontrar soluciones en ambas comunas.

Sin duda, la elección de gobernadores regionales a partir del año 2021 fue un paso histórico, pero hace difícil alcanzar la verdadera descentralización de la que tanto hablamos en la Asociación de Gobernadores Regionales de Chile, AGORECHI. Y eso solo será alcanzable si el Estado se adapta a las particularidades de cada región.

En Tarapacá, ya estamos liderando ese proceso, pero necesitamos un país que crea en sus regiones. Porque también estamos construyendo Chile desde los territorios.

Los invito a conocer el informe RED 2025 en https://scioteca.caf.com.

"Sin verdadera descentralización, no hay desarrollo equitativo".

José Miguel Carvajal, gobernador regional de Tarapacá

En los 80 años de la capitulación incondicional de la Alemania nazi ante los Aliados, que puso fin a la Segunda Guerra Mundial en Europa, la Unión Soviética emergía como un gran vencedor, extendiendo sus dominios en la parte oriental y central del Viejo Continente, creando repúblicas socialistas satélites, formando un bloque al servicio de los intereses de esta potencia mundial que se enfrentará a la otra gran triunfadora del gigantesco conflicto bélico global, enmarcado en la Guerra Fría, los Estados Unidos. Pero se olvida que la Rusia soviética recibió una vital ayuda militar yanqui en su encarnizada lucha contra las hordas nazis, para lo cual se abrieron las rutas árticas, persa, siberiano, por las cuales circularon inmensas cantidades de material bélico, diversos productos y mercaderías, incluyendo alimentos enlatados, gracias al inmenso esfuerzo industrial de la patria de Washington y Lincoln.

No se desconoce que el país del Volga se desangró para rechazar a los ejércitos hitlerianos y aliados y después pasar a la contra ofensiva imparable en el frente oriental hasta llegar victorioso a Berlín, entre tanto los angloestadounidenses, abrían triunfante el frente occidental adentrarse en territorio alemán, era el final de la Segunda Guerra Mundial, años 1944-1945. Sin embargo, el autoritario y agresor de Ucrania, Vladimir Putin, celebra el 8 de mayo de 1945, no tiene memoria por la cuantiosa ayuda bélica del Tío Sam al dictador y genocida Stalin.

Resultaba incómodo para los países occidentales tener que aliarse con la UR.SS. contra la alianza nazi-fascista y aliados, cuando los primeros intervinieron en la guerra civil rusa en favor de los blancos contra los bolcheviques, alcanzando el triunfo los últimos, además los soviéticos firmaron un tratado de no agresión con los alemanes nazis y repartirse Polonia en 1939. Hitler después, en 1941, invadió la Unión Soviética. Las democracias occidentales al lado de un inmenso país euro asiático totalitario. En el extremo Oriente los aliados lucharían contra una potencia asiática imperialista, Japón, que firmó un tratado de no agresión con la Unión Soviética, que esta última rompió en 1945.

Alemania nazi creyó vencer rápidamente, fracasó en Leningrado, peor en Stalingrado, para mantener firme la heroica resistencia Soviética en la llamada Guerra Patriótica, los Estados Unidos, que por otro lado sostenían una durísima lucha contra los fanáticos nipones, en un inmenso frente de guerra insular y continental, organizó las rutas para transportar toda clase de ayuda para reforzar la maquinaria de guerra de la UR.SS. Se abrió la ruta hacia el Ártico, con convoyes de mercante escoltados con buques de guerra, afrontando ataques nazis, con buques de superficie, submarinos y aviones. Los puertos de destino de los cargamentos eran Mursmanks y Arcángel. La ruta persa entraba al Golfo Pérsico, a puertos iraníes e iraquíes, rumbo a la Rusia soviética. Otra ayuda arribaba a Vladivostock, Siberia, vía ferrocarril transiberiano.

Esa es otra historia escasamente conocida, sin pretender disminuir lo que significó para Rusia soviética su gran victoria contra sus implacables enemigos, aunque es necesario ahora divulgarlo, en estos momentos que la Rusia de Putin sigue con su guerra de agresión contra Ucrania, queriendo imponer sus condiciones de paz, sin que se observe un ambiente propicio para lograrla, salvo con un alto costo para Ucrania.

El nuevo Papa, León XIV, con mensaje a ese gran objetivo, ¿tendría acogida en el Kremlin?

Asdrubal Pineda Retamal