Germán Pozo-Sanhueza - La Estrella de Iquique

Un rápido y efectivo procedimiento permitió a Carabineros de Alto Hospicio detener al autor de un robo con intimidación ocurrido en la comuna. La captura fue posible gracias a la oportuna denuncia y a la información precisa entregada por la víctima.

El detenido fue puesto a disposición de la justicia. Tras pasar a control de detención, el hombre fue formalizado por la Fiscalía de Alto Hospicio por el delito de robo con intimidación.

Durante la audiencia, se informó que el hecho delictual ocurrió durante la noche en un local de comida ubicado en avenida Los Cóndores con calle Tarapacá. Cerca de las 23:45 horas, un individuo ingresó al establecimiento con la intención aparente de retirar un pedido. Sin embargo, minutos después, simuló querer devolverlo, colocando su mochila sobre el mesón y extrayendo desde su interior un arma a fogueo con la que amenazó a la trabajadora del local.

En este intertanto, el sujeto exigió a la víctima guardar silencio y le ordenó entregar el dinero de la caja registradora. En cuestión de segundos, logró sustraer la recaudación del día, un teléfono celular del local y una tablet utilizada para gestionar pedidos a través de aplicaciones móviles. Además, intimidó a otra trabajadora y le arrebató su teléfono de trabajo. Antes de huir, también robó una bicicleta que se encontraba estacionada en las afueras del recinto, dándose a la fuga en dirección desconocida.

Tras el hecho, la víctima denunció el asalto a Carabineros, quienes desplegaron un patrullaje por el sector. Gracias a la rápida respuesta policial y la descripción entregada, los uniformados lograron ubicar al presunto autor del delito en las cercanías del lugar, procediendo a su detención.

Durante la revisión de sus pertenencias, Carabineros encontró en el interior de su mochila una cantidad considerable de monedas, además de un arma tipo pistola.

El Primer Juzgado de Letras de Iquique condenó al fisco a pagar una indemnización de $40.000.000 por concepto de daño moral al dirigente sindical Sergio Mauro García Aguilera, quien fue detenido el 4 de diciembre de 1973 y sometido a torturas en dependencias del Regimiento de Telecomunicaciones de la ciudad y, posteriormente, en el campamento de prisioneros de Pisagua.

En el fallo, el magistrado Héctor Kompatzki Delarze desestimó las excepciones de reparación integral del daño y prescripción extintiva puestas por el fisco, tras establecer que el demandante fue víctima de un crimen de lesa humanidad.

"Conforme a lo expuesto y dada la naturaleza de los hechos que afectaron al actor, el contexto nacional en que se produjeron, el reconocimiento que el Estado de Chile ha hecho de las violaciones a los derechos humanos ocurridas entre el 11 de septiembre de 1973 y el 10 de marzo de 1990, y las obligaciones que ha asumido en diversos Instrumentos Internacionales de respetar los derechos humanos y asegurar el acceso de las víctimas a reclamar la reparación de tales atentados, entre otros mecanismos, solo resta concluir que la acción de indemnización de este tipo de daño no puede someterse a las reglas de prescripción establecidas en el Código Civil, siendo, por consiguiente, imprescriptible", establece el fallo.

$40 millones deberá pagar el fisco a dirigente sindical Sergio Mauro García Aguilera.

La noche del viernes, en el sector Península de Cavancha en Iquique, se registró una violenta riña entre personas en situación de calle y personal de limpieza del camión recolector de basura de la empresa Cosemar.

Según informó el municipio, el conflicto inició cuando al menos cuatro personas en situación de calle apedrearon a un camión recolector que pasaba por el sector.

Ante esta situación, siete móviles más que se encontraban realizando el retiro, acudieron al lugar a defender a sus compañeros, agravando aún más la situación.

Debido al tenor de la pelea, Carabineros e Inspección Municipal se hicieron presente en el lugar para controlar la pelea, la que se detuvo tras la llegada de los funcionarios.

Desde el Municipio de Iquique condenaron este acto de violencia, anunciando que iniciarán las investigaciones correspondientes y cursarán multas a la empresa Cosemar por los trabajadores que habrían hecho abandono de sus labores para involucrarse en el conflicto.

Testigos del hecho señalaron que la riña provocó momentos de gran tensión entre los transeúntes que se encontraban en el sector turístico, en una jornada que coincidía con alto flujo de personas por la cercanía del fin de semana.

Algunos residentes manifestaron su preocupación por el aumento de incidentes similares, que comprometen tanto la seguridad como la percepción de orden público en espacios urbanos clave de la ciudad.