Una de las primeras donaciones que recibió la Fundación "Loreto Patitas del Desierto" fue la entrega de más de cien kilos de comida para perros en situación de calle.
La actividad se realizó ayer y contó con la participación de ochenta alumnos de la escuela de lenguaje "Millaray" de Alto Hospicio que está celebrando su semana de aniversario bajo el tema de la solidaridad.
"Los pequeños se organizaron de muchas formas. Se notó que por parte de sus apoderados y de ellos mismos hubo un gran esfuerzo porque nos entregaron comida en pequeñas bolsas que compraron", explicó Loreto Méndez, presidenta de la fundación, quien añadió que esta la primera vez que un colegio los invita para hablar de tenencia responsable de mascotas.
"La actividad fue muy participativa porque les explicamos a los alumnos que es importante comprometerse a una tenencia responsable de sus mascotas", contó Méndez.
La jornada contó con la visita de cuatro mascotas que fueron rescatadas por el refugio que esta fundación construyó en El Boro y que alberga a más de cincuenta animales que han sido rescatados en el desierto.
"Hablamos de cómo funciona nuestra fundación. Les contamos que básicamente trabajamos a través de las distintas donaciones que recibimos desde muchos lugares", manifestó Méndez y agregó que también les describieron cómo se desarrollan sus rescates.
Méndez planteó que como fundación una de sus líneas de trabajo es la educación de los más pequeños ya que si reciben la información adecuada en su formación serán personas con una mejor comprensión de tener una mascota de forma equilibrada y siempre con la precaución de cuidarlas.
Proyección
Luego de esta primera experiencia educativa la presidenta de la fundación espera continuar con estas charlas de formación en niños y jóvenes tanto de Alto Hospicio como de otras comunas de la región.
"La experiencia fue muy buena y estuvo bonita. Queremos seguir participando en más colegios e ir educando a los niños sobre los animales", expuso.
La directora del colegio, Milen Santander, expresó que los niños recibieron con alegría esta visita y le dieron nombre a una de las mascotas quien ahora se llama Pilar y llegó acompañada de Faraona, Pepa y Stella, otras perritas.
80 niños de tres a cinco años participaron en la donación junto a sus apoderados.
Crismary Castillo Marengo
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