Perú al Mundial: ¿ceviche y pisco estarán más sabrosos el jueves?
Eso esperan trabajadores del país hermano desde diversos retoranes peruanos del país. Expectantes en su previa ante Nueva Zelanda y que los tiene cerca de Rusia 2018.
"Llegó la hora de la clasificación". "Hay fe en el triunfo". El periodismo se había entusiasmado con las notas al día. Había con qué. El momento debía ser histórico. "Venceremos", pontificaba Díaz, el "héroe" en el empate contra Italia. La misma 'azzurra' que, semanas más tarde, se coronaría campeona del Mundial de España 1982.
Martes 22 de junio. Minuto 83. Guillermo La Rosa entra al área grande polaca. Cual puntero, define fuerte arriba del portero Jozef Mlynarczyk. Su celebración en solitario al consuelo de la señal de la cruz, daba cuenta de un festejo triste. En silencio. Uno lejos de lo vivido, tan solo meses antes, a esta categórica goleada sufrida por 1 a 5 ante la poderosa escuadra de Lato y Boniek.
Perú, aquel recordado equipo que dejó afuera a Uruguay y Colombia en las Eliminatorias -porque eso parecen ser en Sudamérica- rumbo a la cita planetaria española, de la cual los del Rímac quedarían eliminados en primera ronda, tenía revolucionada a una nación. Al sueño mundial. Como hoy.
Recuerdo de hace 35 años. De dulce y agraz. Pero más de dulce, como prefiere rememorarlo Santo Becerra, oriundo de Lima, quien desde hace dos meses es el encargado del servicio de Sazón Nazca, en calle Esmeralda en Valparaíso. Suspira. Rebusca en su mente aquel recuerdo de infancia. Fanático de la "U", pero la peruana, como se conoce a Universitario Deportes, tiene grabado a fuego aquellas reuniones familiares con cánticos de "¡Viva Perú!". Tenía solo cinco años al hito. "Los 'nene' Cubillas, Chumpitaz, Sotil, Cueto eran excelentes jugadores, casi como los de la sele actual".
De allí su fe a la 'Rojiblanca' que dirige el técnico argentino Ricardo Gareca, quien, a su juicio, ha hecho bien en apostar en los más jóvenes. "No ganamos a Nueva Zelanda porque nos faltó Paolo Guerrero, aunque está Jefferson 'la foquita' Farfán".
A lo que se refiere Becerra es a aquel trabajado empate sin goles de hace unos días entre Perú y los 'All Whites', en el Westpac Stadium de Wellington, en la lejana Oceanía, válido por repechaje al Mundial Rusia 2018. Un duelo a las tablas que, sin embargo, tiene a la 'Bicolor' con la primera opción para abrochar pasajes hasta la tierra del presidente Putin.
¡Que viva Perú, pe!
Y eso es lo que a contar de esta noche, a las 23:15 horas de Perú (21:15 de Chile), se vivirá en un Estadio Nacional de Lima, absolutamente vendido. La efervescencia es tal que la Federación Peruana de Fútbol ya realizó una petición, consigna diario El Comercio: a través de la Resolución Directoral N° 1391-2017, la Dirección General de Gobierno Interior permitirá el uso de banderolas y algunos instrumentos musicales.
William Campos es de Lima. Mientras su familia está allá a la expectativa, como agrega, en Valparaíso palpa esta antesala pelotera... solo. Con nervios. Compañero a las faenas gastronómicas de Becerra en Sazón Nazca como garzón, cree que lo de hoy será difícil. "Estamos sin Paolo Guerrero, nuestro jugador estrella". Consciente del momento, comenta que su padre, William Roberto Campos, sí vivió la última gloria mundialista. Un dato de aquellos: su progenitor hizo dupla, ni más ni menos, que con el 'Chorri' Palacios en las divisiones inferiores del Sporting Cristal, "eso hasta antes de sufrir una rotura de meniscos en ambas piernas a los 18 años" y que obligó su prematuro cuelgue de botines.
Moisés Umasipuma, oriundo de Cuzco, tiene más de un año en Tenta (sandwich gourmet) de la Quinta Región. Señala que verá el match definitorio de su país por internet junto a su pareja venezolana. "Uno siempre tiene la esperanza que la Selección vaya a un Mundial. Hay ganas y nervios por el cupo. Después de décadas, esto es una esperanza... más allá del deporte".
Augusto Bravo lleva 10 meses en Chile tras llegar de su entrañable Machu Picchu. También seguidor del Sporting Cristal. No ha visto a su país en un Mundial. Tan solo se hace una imagen de cómo sería una cita mundialista a través de los comentarios de sus padres y abuelos.
"No hemos logrado nada: esperamos celebrar, ya que sería una alegría para todos mis compatriotas". Para ello, cree, como toda su nación, en esta nueva savia. "Me gusta el contención Yoshimar Yotún y el joven Tapia. Somos parte de un recambio generacional. Una generación que nos merecemos vivir un Mundial".