Recuperar el prestigio de la política
La publicación en los medios de comunicación de los resultados de las últimas encuestas, evidencia la magnitud de la crisis política que se vive, en esta y en las distintas regiones del país.
Esta muestra permite evidenciar, a lo menos tres realidades:
Primero, la mal llamada "clase política" no sólo está desprestigiada, sino que reblandeció y desprestigió, una importante actividad de servicio público. Recuperar el necesario prestigio de la política, una actividad noble y necesaria, será tarea difícil.
La segunda constatación, es que quienes creemos firmemente en el servicio público, al servicio de la ciudadanía y del interés general de la nación, debemos comenzar desde ya la tarea de incentivar a la ciudadanía a impulsar cambios en la elección mas consciente de sus representantes.
En tercer lugar, solo la ciudadanía, con sus votos pueden y deben ser los llamados a realizar los cambios, exigiendo de sus futuros representantes, conductas éticas y morales acordes con sus cargos y, por sobre todo "votando" por conciencia, no por dádivas ni por imágenes, casi faranduleras que se observan en las campañas.
Juan Luis Castillo Moraga.