Leonardo Naveas Nuñez
Pese a las amplias campañas realizadas por los organismos policiales, los programas de televisión que develan a los delincuentes y el recurrente llamado a no confiar en desconocidos, los estafadores continúan operando en la ciudad, tomando a los descuidados y generando nerviosismo y temor en sus posibles víctimas.
De acuerdo a los antecedentes entregados por la Policía de Investigaciones, el mayor número de estos casos ocurre en el sector centro de la ciudad.
Al respecto, el jefe de la Brigada Investigadora de Delitos Económicos de Iquique, subprefecto Ariel Fuentes, la PDI tiene conocimiento de individuos que operan en el sector de los bancos y pese a que no se registra un aumento, también han recibido denuncias por estafas telefónicas. "Hay personas siniestras que van al sector de los bancos y sobre todo donde llegan muchas personas de la tercera edad para retirar fondos o para cobrar su pensión e inventan el famoso cuento del tío".
Testimonio
Uno de los afectados fue Pablo Contreras, vecino que decidió explicar el caso que vivieron sus padres. Según su relato, su progenitor tiene 75 años y recibió un llamado telefónico donde una mujer, supuestamente su cónyuge, le solicitaba auxilio manifestándole que la habían secuestrado y que para ser liberada debía depositar un millón de pesos en una cuenta bancaria.
"Como mi papá no es muy amigo de la tecnología, no supo llamar a mi mamá y tampoco se le ocurrió. Partió al banco a pedir un préstamo", confidenció.
Mientras eso ocurría, su madre también recibió una llamada, donde le informaban que su marido se encontraba internado grave en el Hospital, por lo que ella concurrió al centro asistencial, donde obviamente no lo encontró.
El iquiqueño comentó que, de acuerdo a lo que le manifestó la policía al momento de estampar la denuncia, esa acción la realizaron para que sus padres no pudieran encontrarse antes de concretar el depósito.
Según el testimonio del iquiqueño, su madre quedó preocupada y decidió solicitar ayuda a Carabineros, donde comenzó a despejarse la situación.
Tras regresar a la casa, se enteró de lo ocurrido y, lo que es peor, que su marido ya había depositado el dinero, es decir, se había materializado la estafa.
Recomendaciones
El subprefecto Ariel Fuentes recomendó que en caso de recibir una llamada de este tipo, lo mejor es mantener la conversación y realizar preguntas específicas que permitan verificar de quién se trata y de esa forma descubrir si es una suplantación.
"Cuando es tan estresante una llamada telefónica de este tipo, cuesta mantener el equilibrio de la realidad, por lo que hay que tener una cierta cuota de frialdad".
Agregó que es importante saber que la PDI o Carabineros no realiza llamadas solicitando dinero y que ante cualquier duda lo más relevante es concurrir rápidamente a un cuartel y hacer la denuncia.
Llamada telefónica, falso secuestro de un familiar
Este tipo de estafa tiene un patrón bastante único. Inventan una historia ficticia, donde un familiar habría sido secuestrado , llaman por teléfono, se escuchan gritos y llamados de auxilio, dan algún tipo de indicaciones y solicitan un depósito bancario a cambio de no poner en riesgo la vida de un familiar.
Estafa que involucra a un pariente accidentado
Los delincuentes contactan telefónicamente a su víctima y le indican que un familiar o conocido sufrió un accidente de tránsito y que el vehículo resultó dañado. A eso agregan que deben pagar el servicio de una grúa, entregan un número telefónico para realizar la gestión y luego indican que se debe pagar por adelantado depositando a través de una transferencia electrónica.
Cuento del tío, el boleto de la Lotería
Generalmente afecta a personas de la tercera edad. Contactan personalmente a la víctima y le indican que tienen el boleto ganador de la lotería. Posteriormente indican que necesitan dinero para realizar un trámite y que a cambio le entregan el boleto. Posteriormente les ofrecen que, junto a la devolución, les compartirán parte del premio que, logicamente, no existe.
1
2
3