Intendentes del norte cuentan las dificultades a casi dos meses del inicio del estallido social
Las autoridades regionales dan a conocer su visión de lo que les tocó vivir desde la crisis social, como también hacen un balance de los daños.
Redacción - La Estrella de Arica - La Estrella de Iquique - Mercurio Antofagasta - El Diario de Atacama
Luego de 51 días desde que comenzó el estallido social en Chile, los intendentes de las regiones del norte del país, parecen concordar en los efectos a mediano plazo, y también las consecuencias inmediatas que han generado las movilizaciones en la economía local.
Para los intendentes de Arica y Parinacota, Tarapacá, Antofagasta y Atacama, una de las mayores complejidades para abordar la crisis social se concentra en las dificultades para brindar control del orden público desde los gobiernos regionales.
El intendente de Tarapacá, Miguel Ángel Quezada, dijo que lo más difícil fue ver la violencia, destrozos y saqueos, como también los efectos en los microempresarios.
En tanto Edgar Blanco, intendente Regional de Antofagasta, sintetiza el problema común al que se enfrentan diariamiente los distintos jefes regionales. "Estamos trabajando y evaluando estrategias todos los días con Carabineros para restablecer el funcionamiento de las ciudades", precisó.
Si bien, los daños a la infrasestructura pública es mayor en regiones como Antofagasta o Copiapó, un problema común aparece en la afectación de la actividad económica de las pequeñas y medianas empresas, sobre todo de aquellas asociadas al comercio.
Unánimamente los jefes regionales afirman que la reactivación económica es parte esencial del trabajo que deberán desarrollar los próximos meses.
El intendente de Tarapacá manifestó que fue impactante dimensionar los efectos de los saqueos, la violencia y los destrozos, y que la recuperación de los puntos vandalizados significa una inversión de $5 mil 114 millones.
-¿Qué ha sido lo más complejo para la región durante la crisis social?
-Lo que es más evidente, los saqueos, la violencia, los destrozos del mobiliario público es lo que más hemos visto en el proceso de los días y es como se han ido destruyendo los puestos de trabajo en la región, eso ha sido muy impactante. Lo otro impactante es el efecto que ha tenido en el micro y pequeño comercio, porque uno al principio estaba sorprendido con la violencia, con el saqueo y en cómo se actuó, pero la profundidad que ha tenido esto en nuestra región es un tema y lo otro es el efecto que está teniendo hoy en día respecto de lo que significa lo que también ha generado el comercio ambulante, el cual también nos tiene muy preocupados en nuestra región.
-¿Cuál es la infraestructura pública y privada más dañada?
-Nosotros hemos calculado en torno a la infraestructura pública, hasta ahora, alrededor de unos 3 mil 500 millones de pesos. Esa es la inversión que tendría que hacerse para recuperar y todavía no tenemos bien claro cuánto nos va a costar recuperar la capa asfáltica de algunos sectores. El otro daño que tenemos contemplado son las obras portuarias de Playa Bellavista que son alrededor de 36 millones, que corresponde a cuando sacan las rejas. Además tenemos los dos incendios en las plazas de peaje por un monto que mil 100 millones, que si bien es privado es parte de lo que tenemos que recuperar. En cuanto a los semáforos en Iquique, ya llevamos -hasta el domingo 1 de diciembre- 14 semáforos, y ahí tenemos en promedio 10 millones por semáforo, o sea, 140 millones de pesos y nosotros calculamos unos $200 millones, porque hay que ver el tema eléctrico. En las cámaras de seguridad, mobiliario urbano y otros hay otros 278 millones de pesos. Y uno de los temas que es incalculable, y que tenemos que ver de qué manera podemos cuantificar, es el daño al patrimonio. Hemos tenido alto riesgo con el Teatro Municipal y ya está sucia la fachada, porque han realizado tres o cuatro barricadas ahí. Entonces solo con lo que podemos calcular estamos en los 5 mil 114 millones de pesos.
-¿Cómo usted califica el actuar de Carabineros durante este tiempo en la región?
-He estado permanentemente en Cenco (Central de Comunicaciones) mirando cómo actúan los protocolos que ha tenido Carabineros, la forma de actuar y cuando han actuado. Yo diría que han actuado de acuerdo a los protocolos que hemos tenido y yo aquí quiero ser muy claro y decir que Carabineros no son saqueadores, no son violentistas, no están incitando a la violencia. Al contrario, cada vez que ha actuado (lo hace) vía megáfono o ha avisado que va a intervenir para que (los manifestantes) se desplacen a las veredas y ya cuando ha ocurrido un grado de violencia ha actuado Carabineros. Lo que también tenemos que entender es que en cuanto al grado de violencia no es normal que alguien encienda un neumático en la avenida Arturo Prat, por lo tanto desde ahí parte la violencia, o tirarle una pedrada a carabineros o a una infraestructura pública o privada.
-¿Cuántas personas heridas registran hasta ahora?
-La gente que se acercó a algunos de los mecanismos de salud, ya sea un Cesfam, una posta o el mismo hospital, fueron alrededor de 154 personas que se acercaron ahí por distintos temas. Hay que aclarar que esas son atenciones, por lo tanto puede haber una misma persona que recurrió dos o tres veces porque iba a curaciones u otros procedimientos de acuerdo a lo que había constatado anteriormente. Todos ellos (los heridos) tienen la oportunidad, y le dimos la instrucción al Servicio de Salud que tenía que hacer la denuncia pertinente para que eso estuviera en conocimiento de la Fiscalía y los tribunales pertinentes para que se investigara en el caso de que fuese necesario esa situación.
-Por lo que sabe, ¿cuál es el perfil de quienes protagonizaron los desmanes en la región?
-Definitivamente no son los que marchan pacíficamente. Lo que sí en cada marcha hemos visto que se tratan de ocultar al alero de los que marchan pacíficamente por las demandas sociales, yo creo que ahí tenemos un perfil de gente que definitiva y organizadamente salen a violentar la ciudad y en eso, lo que queremos, es llamar a poder entender que de esa manera no se van a conseguir los temas y que tenemos que trabajar en nuestra región, porque nuestro territorio tiene muchas oportunidades, pero también hay que cuidarlo para seguir avanzando. Entre medio aparecen los saqueadores, que se aprovechan de estas instancias y otros que se adhieren a esto, que uno podría decir que son parte de estos saqueadores, los mecheros y gente que definitivamente sale a delinquir. Es lo que podemos observar en aquellos lugares donde se han producido algunos incendios en que han robado y, por lo tanto, creo que el objetivo no es la demanda social, era claramente el robo.
En la región de Arica y Parinacota las mypes representan el 99,7% de las empresas de la región las que han visto mermadas sus ventas entre un 50 y 75%. Para el intendente regional, Roberto Erpel, por tanto, el paquete de medidas que apuntan a la reactivación del sector resultan fundamentales para el futuro regional.
-¿Qué ha sido lo más complejo para su región durante la crisis social?
-Lo más difícil es lo que han tenido que enfrentar las personas que han visto el actuar de la delincuencia en las calles, que han sentido temor y que han tenido que alterar todo su sistema de vida. Hemos tenido grandes pérdidas en la región, en materia de fuentes laborales, comercio y turismo, con repercusiones futuras muy negativas, según lo que han adelantado distintos expertos.
-¿Cuál es la infraestructura pública y privada más dañada?
-El informe del Minvu revela que a la fecha hay 102 puntos de Arica afectados por daños. El caso más conocido, por los enfrentamientos que allí han ocurrido, es el eje de las avenidas Tucapel y Diego Portales, pero también hay una destrucción importante en las calles Santiago Arata, 18 de Septiembre, Chapiquiña y Loa, entre otras. También tenemos un daño importante a monumentos nacionales e inmuebles de conservación histórica de Arica. Desde la destrucción prácticamente irreversible de símbolos como el busto centenario de Cristóbal Colón hasta daños reparables como los rayados a la fachada de la ex Aduana. El sector privado, cuenta entre sus principales bajas el incendio que consumió por completo el supermercado Lider.
-¿Tienen una estimación económica de estos daños?
-Hasta el momento el Ministerio de Vivienda ha cifrado en 300 millones de pesos los daños a la infraestructura pública. Estos recursos ya fueron solicitados al Ministerio, a través de la Seremi respectiva, para poder comenzar pronto con el arreglo de estos sectores.
-¿Cuántas detenciones han registrado en este tiempo las policías y cuáles son los principales delitos imputados?
-Desde el inicio de las manifestaciones, Carabineros ha registrado 179 detenciones y la PDI 36, principalmente por delitos de desorden, daños, robo en lugar no habitado, infracción a la ley de armas, posesión y porte de artefactos explosivos o incendiarios.
Mil civiles heridos -20 hospitalizados- y 300 carabineros, es parte del complejo resumen de esta crisis en la región de Antofagasta. El intendente Edgar Blanco reconoce que lo más complejo ha sido la violencia, fenómeno que ha sumado dos mil detenciones.
-¿Qué ha sido lo más complejo para la región durante la crisis social?
-Sin duda los actos vandálicos de grupos minoritarios y que han afectado a la gran mayoría de las personas de la región que quieren tranquilidad y hacer su vida cotidiana. Hemos vivido jornadas complejas, muy violentas, que no tienen ninguna justificación como el ataque a la Junji. No puede haber nada más alejado de una demanda social que atacar a un servicio dedicado a los niños. Por ello estamos trabajando y evaluando estrategias todos los días con Carabineros para restablecer el funcionamiento de las ciudades. Ese es el desafío y con esa convicción asumí este cargo en medio de la crisis.
-¿Cuál es la infraestructura pública y privada más dañada? ¿Tienen una estimación económica de estos daños?
- Primero creo que el principal daño lo ha sufrido la gente, el emprendedor, los niños que no han podido ir a clases. Ahora si nos abocamos a edificios, por su significancia, lo de Junji golpeó mucho, pero sin duda lo más grave en cuanto a daño es el Servicio de Impuestos Internos, el Registro Civil y el incendio de la Cooperativa de Carabineros que además afectó a los locales colindantes. En cuanto a privados, el incendio de una farmacia fue lo más grave porque se perdió completamente un edificio histórico de Antofagasta. A eso debemos sumar lugares emblemáticos como la Intendencia y la municipalidad de Calama además de los daños en señaléticas y semáforos. En infraestructura pública evaluamos los daños en cerca de $4 mil millones. A nivel privado, solo en daño a pequeñas empresas tenemos una estimación de $400 millones, a lo que hay que sumar los daños a la banca y supermercados que por supuesto elevarán la cifra.
-¿Cuáles serán los ejes de la reactivación económica para la región?
-Por un lado tenemos el foco en apoyar a las pymes, es por ello que Corfo y Sercotec han levantado dos catastros y se dispondrán fondos para ir en ayuda a través del programa MIPymes. Además hemos solicitado apoyo al nivel central para que se entreguen recursos frescos para la reconstrucción.
Patricio Urquieta García, intendente de Atacama, señala que un informe de la Subdere cifró en $1.000 millones los daños a la infraestructura. Diversos servicios públicos, la municipalidad y las oficinas de Enami fueron vandalizadas. El comercio local sufrió serios daños con el correspondiente impacto en el empleo local.
-¿Qué ha sido lo más complejo para su región durante la crisis social?
- Ha sido muy difícil ver que la violencia de algunos grupos de delincuentes no cese ante el llamado a la paz que hace la inmensa mayoría. Hay grupos que se mueven con el único ánimo de denostar, de amenazar e incluso destruir lo que le ha costado a tantas generaciones. Manifestaciones pacíficas, de acuerdo, pero no podemos aceptar violencia, ni destrucción. En Atacama sobrevivimos a terremotos, sequía, aluviones, y aquí estamos, de pie, con fe, y sobre todo con ganas de salir adelante.
-¿Cuál es la infraestructura pública y privada más dañada?
- El centro de Copiapó ha cambiado mucho. Ha costado tanto levantar la comuna después de los aluviones. Simbólico en los servicios públicos fue que hayan quemado la oficina del Registro Civil. Atacaron la Municipalidad de Copiapó, el edificio de la Intendencia, además de producir daños en las oficinas de Enami y las Seremías de Educación y Obras Públicas. Si da una vuelta por la ciudad, verá que dañaron semáforos, la señalética vial, los monumentos, la luminaria, los paraderos, el pavimento de las calles, y a eso se suman las carreteras, entre otros.
-¿Tienen una estimación económica de estos daños?
- Al 24 de noviembre, la Seremi de Economía catastró 139 locales comerciales afectados en Copiapó, y realizaron una estimación de pérdidas que superan los $600 millones. Por otro lado, la unidad regional de Subdere levantó información sobre los daños a la propiedad pública, y los estimó en más de $1.000 millones.
-¿Cuántas detenciones han registrado en este tiempo las policías y cuáles son los principales delitos imputados?
- Hasta el 5 de diciembre, la PDI realizó 113 detenciones y Carabineros 598. En total son 711. El delito más recurrente ha sido el robo y los daños, pero también hay porte de elementos incendiarios, arma blanca, entre otros.
"Uno al principio estaba sorprendido con la violencia"
Miguel Ángel Quezada:
"Hemos tenido grandes pérdidas en la región"
Roberto Erpel:
"El principal daño lo ha sufrido la gente"
Edgar Blanco:
Patricio Urquieta
"Tenemos 139 comercios afectados"